Shabat de Luna llena: Encontrando el amor y consuelo

Inspiradoras palabras de Torá que fueron enseñadas por el Rabino Simon Jacobson y su hermano Rab. Iosef Itzjak.

Las llamas de Shabat
En la base de la llama, donde se conecta con la mecha, la luz azul, negra y cobalto representan la lucha de nuestra alma con la oscuridad, las inseguridades, los miedos y similares. Hemos entrado en el mundo de la luz, pero la luz todavía está luchando con la oscuridad. Por encima de esto, el cuerpo de la llama está naranja, amarillo y rojo. Esto refleja nuestra experiencia pura de la luz y la alegría, nuestras fuerzas, el poder del alma que quema brillante. Finalmente, por encima de la llama hay un fuego oculto que no es visible para el ojo. Esta es la parte invisible de nuestra alma que va más allá de todo, que no se ve afectada por las vicisitudes de nuestras luchas diarias. Es la parte de nosotros que nunca ha sido y nunca será «quebrada». Es nuestra esencia Divina.

Estos tres aspectos de la llama también se relacionan con las tres etapas o comidas de Shabat. El viernes por la noche entramos en el terreno de la luz del Shabat, pero aún estamos lidiando con la memoria de nuestra desafiante semana de trabajo. En el Día de Shabat nos sumergimos en la paz, belleza y serenidad. Por último, la tercera comida, representa la llama oculta trascendente, al entrar en un lugar que está más allá de cualquier expresión consciente.

El 15 de Av – Meditaciones de Luna Llena
La luna llena de Av está asociada con las relaciones. En este día, «las hijas de Jerusalén salían … y bailaban en los viñedos», y «el que no tenía esposa iría allí» para encontrar una novia (Talmud, Taanit 26b). Pero ¿por qué esto es así?, ¿por qué este día está asociado con la búsqueda de un alma gemela?

El judaísmo nos enseña que cada persona tiene un «bashert» , la otra mitad de su alma que se busca para casarse. Cuarenta días antes de que una persona nace, una voz celestial anuncia su «bashert.» El 15 de Av es cuarenta días antes del 25 de Elul, el primer día de la Creación. Es por eso que la luna llena de Av celebra las relaciones (B’nei Issajar).

La luna nos enseña tres lecciones fundamentales sobre las relaciones exitosas:

1. La luna sabe cómo ser humilde e invisible. No se consume con su propio ego. Esa es la lección # 1 en las relaciones: Sé humilde, lo suficientemente fuerte como para saber cuándo aplazar.

2. Aun cuando brilla, la luna sabe que la luz no es suya. Su poder proviene de otro lugar, su fuerza es reflejada y canalizada desde un lugar más alto.

3. La luna ilumina la oscuridad. No trata de erradicar la noche, sino que hace brillar la luz en la oscuridad. La luna llena no niega o erradica la debilidad, dificultad y dolor, sino que lo reconoce y a pesar del dolor, sigue brillando. Una relación sana no es sólo acerca de la perfección, sino de la sensibilidad de reconocer y saber cómo cooperar e iluminar nuestras debilidades, incluso a nuestros lados más oscuros.

Se puede amar de verdad sólo cuando no es consumido por usted mismo . Cuando uno está lleno de sí mismo, con su propia luz solar, puede lograr muchas cosas buenas, pero no el amor. Conviértete en una luna, un recipiente, y así podrá contener y amar a otro. La luna llena significa estar lleno con el otro. Su sentimiento de carencia y falta de plenitud le permite convertirse en el más completo.

Shabat Najamú
Shabat Najamú es el primer Shabat después de Tishá Be Av, la fecha en que los dos Templos Sagrados fueron destruidos, cerrando la ventana entre el cielo y la tierra. «Najamú, Najamú Ami – consuelen, consuelen a mi pueblo», las palabras del profeta reverberan a través de las semanas siguientes, las siete semanas de la Consolación. Después de la degradación y el sufrimiento experimentado por el pueblo judío, el profeta los consuela. Pero los Judíos responden diciendo que no quieren ser consolados por los profetas, sino por Di-s mismo.

¿Por qué Di-s consuela a los Judíos a través de un mensajero? Mandando a un ser humano para consolar a la gente, Di-s impregna a cada uno de nosotros la habilidad y el poder de consolar a otros. Podría parecer que un mortal puede hacer muy poco para consolar a otro, no tenemos el poder para compensar la pérdida o la capacidad de cambiar la situación de alguien. Pero, a través de estas palabras de consuelo que se nos da a través de un ser humano, Di-s nos da a cada uno de nosotros la fuerza Divina para realmente consolar a otro ser humano que sufre.

Entradas recomendadas