Cinco hermanas: La historia de las hijas de Tzelafjad

Un grupo de cinco hermanas se acercaron a Moisés delante de toda la nación Judía. Eran las hijas de Tzelafjad, las mujeres que fueron privilegiadas en tener un capítulo agregado en la Torá por ellas: Majla, Noah, Joglah, Milka y Tirtza. Aquí la historia.

La división de la Tierra

Era el año número cuarenta desde el éxodo de Egipto, poco tiempo antes de que pueblo judío entrara a la Tierra Prometida. Di-s le había informado a Moisés que el territorio de cada tribu sería determinado por sorteo. Cada hombre en la tribu recibía una parte de tierra en el territorio de su tribu. Si un hombre fallecía, sus hijos heredaban su propiedad, asegurando de tal manera que esa porción permaneciera en la familia que originalmente le fue asignada.

Un hombre, Tzelafjad, de la tribu de Menashe, tenía sólo hijas mujeres. Él había fallecido en el desierto, y sus hijas estaban preocupadas de no recibir una parte en la Tierra de Israel. Por eso, le pidieron a Moisés que les diera la tierra que le hubieran dado a su padre.

La Torá describe la escena:

Se pararon delante de Moisés, Elazar, el Sumo Sacerdote, los líderes y la congregación, en la entrada de la Tienda de Encuentros, y dijeron: «Nuestro padre falleció en el desierto. Él no estuvo en el grupo de Koraj que estaban en contra de Di-s, de hecho, falleció por su propio pecado, y no tuvo hijos varones.

¿Por qué el nombre de nuestro padre debe ser eliminado de su familia por no haber tenido hijos varones? Dénos una parte de tierra entre los hermanos de nuestro padre»

Moisés llevó el caso delante de Di-s. Di-s le dijo a Moisés lo siguiente: «Las hijas de Tzelafjad hablaron correctamente. Seguro debes darles una porción de tierra entre los hermanos de su padre, y transferirles la herencia de su padre a ellas» (Números 27:2-7)

De hecho, en su mérito, las leyes de herencia siguen este precedente. Desde ese momento, uno que fallece sin hijos varones, las hijas heredan sus pertenencias.

El pecado de Tzelafjad

Las hijas describen que la muerte de su padre fue «por su propio pecado». El Talmud trae dos opiniones sobre cuál fue ese pecado, igualmente los dos están de acuerdo en que fue hecho con buenas intenciones.

Una visión es de que Tzelafjad estaba entre los Maapilim, los Judíos que después de que Hashem haya decretado los cuarenta años en el desierto, volvieron a guerrear para entrar a la Tierra de Israel. Éstos fueron matados por los Amalekitas y Cnaanitas, pero sus intenciones fueron buenas.

La segunda opinión es que Tzelafjad fue el hombre ejecutado por violar el Shabat juntando madera. Aquí también, el Midrash atribuye intenciones positivas a su acto.

Según este Midrash, Tzelafjad había escuchado a algunos Israelitas decir que su sentencia de deambular significaba que tampoco tenían que cumplir con los mandamientos. Para mostrarles que estaban equivocados, violó el Shabat, dando una lección que le costaría su propia vida.

Cualquiera haya sido el pecado de Tzelafjad, no era tan severo como para que su nombre fuera eliminado de las páginas de la historia Judía. Al contrario, gracias a sus hijas, su nombre tiene connotaciones positivas.

Las hijas de Tzelafjad

A pesar de que no fueron dados muchos detalles sobre ellas, una lectura cuidadosa de las fuentes nos provee una imagen de inteligencia

La inteligencia de las hermanas era evidente de su clara presentación de su caso. De hecho, Di-s mismo aprobó sus argumentos diciendo: «Las hijas de Tzelafaj han hablado correctamente»

En varios lugares en donde aparecen escritos los nombres de las cinco hermanas, aparecen en diferentes orden. Esto es para demostrar que las cinco eran iguales en sabiduría y justicia.

También se nos ha dicho que a pesar de que se casaron tarde, todas fueron bendecidas con hijos.

Las hijas de Tzelafjad representan el amor de las mujeres judías por la Tierra de Israel. Nuestros Sabios notan el contraste entre los hombres, que tenían miedo de entrar y lloraron «déjanos poner un lider y volver a Egipto», y las mujeres que estaban ansiosas en poseer la tierra y hasta demandaron una parte en ella.

Desarrollos posteriores

Poco tiempo después de los eventos descritos anteriormente, los parientes de Tzelafjad se acercaron a Moisés con otra preocupación: Si estas mujeres se casaban con alguien de otra tribu, sus tierras luego se transferirían a la posesión de sus hijos (que no pertenecían a esa tribu), y se perdería de la tribu de Menashe. Moisés transmitió de Di-s la respuesta: de hecho, las hijas de Tzelafajd sólo se podrían casar con hombres de su tribu. Las cinco se casaron con sus primos.

Por catorce años, cualquier mujer que heredara la propiedad de su padre podía casarse sólo con alguien de su misma tribu. Luego que la tierra fue conquistada y dividida, ésta ley dejó de cumplirse, y podían casarse con quien quisiesen. Esto se declaró oficialmente como una ley el 15 de Av, y esa es una de las razones por la cual celebramos ese día.

Por: Mendy Kaminker



Difíciles Batallas

La Parashá que leemos esta semana comienza con la recompensa que recibió Pinjas por su acto de valentía, imponiendo castigos a Zimri ben Salu, quién estaba contra Moisés, y cohabitaba con una mujer Midianita. Zimri era jefe de la Tribu de Shimon, quienes eran fieles a su líder. El acto de Pinjas fue peligroso. El Talmud habla de los milagros que ocurrieron ese día, los cuales le permitieron a Pinjas salir ileso de la carpa de Zimri.

El acto de Pinjas no fue muy racional. Sus posibilidades de éxito eran mínimas, pero estaba siguiendo el ejemplo del primer Judío. Abraham era un hombre joven en Ur, viviendo en una sociedad pagana, cuando comenzó a predicar una filosofía de monoteísmo. Nimrod no estaba contento con lo que Abraham estaba creando. De hecho, fue llamado el «Ivri», que significa «del otro lado», porque todo el mundo estaba de un lado, mientras que él, junto con sus creencias monoteístas, estaban del otro. Pero Abraham no se inmutó, porque sabía que lo que estaba haciendo era lo correcto.

Las historia de Abraham y Pinjas, se han repetido como un disco rayado a través de nuestra difícil y gloriosa historia. Nuestra nación no existiría ahora si no fuera por todos los actos heroicos realizados por valientes individuos y grupos. Dos ejemplos: La festividad de Januca, celebra la valentía de un pequeño grupo de personas que se rehusaron a ser parte de la contaminación espiritual del Helenismo, y pelearon contra un ejército Griego, que era mucho más grande y fuerte que el de ellos. Esta Parashá, siempre se lee cerca del 12 de Tamuz, el día en el que los Jasidim de Jabad celebran la milagrosa liberación de Rabi Iosef Itzjak Schneerson, el sexto Rebe de Jabad, de la prisión comunista en 1927. En un momento en donde enseñar Torá significaba la muerte o trabajo forzoso en Siberia, el Rebe no se desesperó. Él desafió el régimen Soviético, y animó a sus seguidores a que hicieran lo mismo. Estableció Yeshivot subterráneas, Mikves, etc, y él personalmente arregló los temas financieros para toda esta red subterránea.

El resultado final de estas historias es la victoria. Millones de descendientes aún siguen el camino que Abraham abrió. (En realidad, su legado incluye no sólo a los Judios, sino también a la mayor parte de la población del mundo que siguen las religiones que son ostensiblemente monoteístas, y todos ellos tienen sus raíces en Abraham). Pinjas fue recompensado por su acto, y hasta el día de hoy sus descendientes Sirven como Cohanim (Sacerdotes), quienes bendicen al pueblo Judío y retomarán sus Servicios en el Templo Sagrado cuando llegue el Mashiaj. Los Griegos fueron desterrados de la Tierra Santa, el judaísmo siguió floreciendo, y se nos ha dado unos días extra cada año para celebrar, comer, casarse… La educación judía siguió detrás de la Cortina de Hierro hasta el día que cayó. Ellos se han ido, y la Torá aún está aquí.

Incluso cuando las probabilidades están en nuestra contra, debemos pelear por lo que es correcto. Debemos hacer lo que nos corresponde a nosotros, y Di-s se encargará del resto.

Por: Naftali Silberberg



Hombres y mujeres; ¿Diferentes pero iguales?

Luego de miles de años de dominación masculina, ahora nos enfrentamos con el principio de la era feminista, cuando las mujeres se elevan a su nivel apropiado, y todo el mundo reconocerá la armonía que existe entre hombre y mujer.

-El Rebe

Una pareja que estaba teniendo problemas de comunicación, fue a ver al Rebe. La mujer dijo que su marido estaba consumido por su trabajo, y que cuando finalmente encontraba tiempo para hablar con ella, la criticaba y le daba órdenes. El marido dijo que su mujer no le tenía respeto y que no escuchaba ninguna de sus sugerencias.

«¿Por qué piensas que tu mujer debería escucharte?» le preguntó el Rebe. «Porque una mujer debe escuchar a su marido», respondió.

«¿Pero por qué una mujer debería escuchar a su marido?», preguntó el Rebe. «Porque el hombre es el dueño de la casa».

«No», dijo el Rebe. «Lo primero que debes hacer es seguir, como hombre, es el edicto que «un hombre debe honrar a su mujer más que a sí mismo». Así la mujer piadosa tendrá un marido a quien pueda respetar y amar. Si el hombre no cumple con su rol como tal, entonces es la mujer quien debe respetuosamente, llamarle la atención».

La sociedad contemporánea está comenzando a investigar las verdaderas distinciones entre hombres y mujeres. Además de las diferencias fisiológicas obvias, hay también diferencias entre sus formas de pensar, hablar, y comportarse.

Para poder comprender la esencia de la naturaleza del hombre y la mujer, debemos dejar de lado la subjetividad humana y mirar a través de los ojos de Di-s. Cada ser humano, hombre y mujer, ha sido creado con el mismo propósito: unir cuerpo y alma para poder hacerse a ellos mismos y al mundo un lugar mejor y más sagrado. En su servicio a Di-s, no hay ninguna diferencia entre hombres y mujeres; la única diferencia es la manera en la que el servicio se manifiesta.

¿Cuáles son las diferencias entre los hombres y las mujeres?

Hombre y mujer representan dos formas de energía Divina; están los elementos masculinos y femeninos en una sola alma.

Di-s no es ni masculino ni femenino, pero tiene dos formas de emanación: la forma masculina, que es más agresiva, y la forma femenina, que es más sutil. Para que un ser humano pueda llevar una vida total, debe tener las dos formas de energías: el poder de la fuerza y el poder de la sutileza; el poder de dar y el poder de recibir. Idealmente, estas energías emergen sin problemas.

Los hombres son físicamente más fuertes. Por naturaleza, son usualmente más agresivos y más externamente orientados. En contraste, la mujer generalmente personifica la ideal dignidad profunda. Algunas personas confunden dicha sutileza con debilidad; en verdad, es más fuerte que la fuerza física más agresiva que se pueda imaginar. La verdadera dignidad humana no grita; es una voz fuerte y segura que habla desde adentro. La naturaleza de la mujer, incluso que es sutil, no es débil. Y la naturaleza del hombre, incluso que es agresiva, no es bruta. Para que el hombre y la mujer sean completos, deben poseer ambas energías.

La respuesta no es que el hombre y la mujer deben intentar ser iguales. Todos los hombres y las mujeres deben ser ellos mismos, percatarse que Di-s nos dio a cada uno habilidades únicas para poder alcanzar nuestra meta, y que nuestra responsabilidad primordial es aprovechar al máximo estas habilidades.

¿Qué se considera la verdadera liberación para ambos sexos?

A pesar que el feminismo legalmente pide un fin a la dominación y abuso masculino, y pide derechos iguales para la mujer, es vital llegar a la raíz de la distorsión: que nuestro foco en la vida, tanto de los hombres como de las mujeres, no es simplemente satisfacer nuestros egos y necesidades, sino servir a Di-s. La verdadera liberación de las mujeres no es meramente buscar igualdad dentro de un mundo machista, sino liberar los aspectos Divinos femeninos de la personalidad de la mujer y usarlos para el beneficio de la humanidad.

Luego de tantos años de dominación machista, nos encontramos ahora en el alféizar de la verdadera era feminista. Es tiempo ahora para que la mujer eleve su verdadera prominencia, cuando el poder sutil de la energía Divina permita nutrir el poder abierto de la energía masculina. Ya hemos comprobado que podemos usar nuestra fuerza para eliminar a los demonios alrededor nuestro; aprendamos ahora a nutrir la Divinidad que hay adentro.

Acción

Los hombres y las mujeres deben darse cuenta de sus respectivos roles iguales e intentar complementarse uno con el otro en su lucha en común para mejorar la vida. Para poder corregir el abuso de la dominación machista, los hombres deben concentrarse en usar sus cualidades dominantes para bien. Deben usar su fuerza para proteger y preservar el carácter femenino, ayudando a las mujeres a darse cuenta de su verdadero potencial para revelar Divinidad que tanto se precisa hoy en día.

Aprendamos qué es lo que significa ser hombre o mujer, sobre las energías masculinas y femeninas. Aprende a aprovechar tu potencial, balancear estas energías para llevar una vida con sentido y productiva: una vida Divina. Y finalmente, aprende a apreciar y a respetar a tu compañero masculino o femenino.

Las 3 semanas de duelo

Determinación para reconstruir

Además de las reglas y restricciones “técnicas” durante este período de 3 semanas, dedicamos más tiempo a contemplar el estado menos que perfecto en el que se encuentra el mundo ahora y lo que podemos hacer para mejorarlo aumentando las obras de bondad.

El Rebe instó a que las Tres Semanas deberían ser un tiempo de mayor estudio de la Torá y de dar caridad, de acuerdo con el versículo “Tzión será redimida por la ley, y sus repatriados por la caridad”.

Particularmente, el Rebe solicitó una y otra vez el estudio de aquellas porciones de la Torá que tratan sobre la construcción del Templo Sagrado.

Las Tres Semanas deben ser un tiempo de mayor estudio de la Torá y actos caritativos.

¿Por qué estas leyes? El Rebe basó su pedido en un diálogo, citado en el Midrash, que ocurrió después de que Di‐s le dijo al Profeta Ezequiel que instruyera al pueblo judío entonces exiliado sobre las medidas y el diseño de tercer Templo Sagrado:

“Señor del mundo”, respondió Ezequiel,

“¿por qué me dices que vaya y le diga a Israel la forma de la Casa; ahora están en el exilio en la tierra de nuestros enemigos, ¿hay algo que puedan hacer al respecto? será hasta que regresen del destierro, entonces iré y les in‐ formaré”.

Di‐s respondió: “¿Debería ignorarse la construcción de Mi Casa porque Mis hijos están en el exilio?

El estudio del diseño del Templo Sagrado como se detalla en la Torá puede equipararse a su construcción real. Ve y diles que estudien la forma del Templo Sagrado.

Como recompensa por su estudio y su ocupación con él, lo consideraré como si realmente construyeron el Templo Sagrado”.

¡Es nuestra generación en particular, que se encuentra en el umbral de la Redención, la que debe estudiar estas leyes
con la conciencia de que estas leyes serán muy prácticas en el futuro inminente.

El hombre que salvo al judaismo del comunismo … y forjo una revoloción en America

Una historia relatada por Rabi Iosef Itzjak Schneerson, el Rebe Anterior de Lubavitch, quien a través de su entrega y sacrificio personal y el de sus emisarios, salvó al judaísmo soviético de las llamas del comunismo.

El “Movimiento Iluminista” en su batalla contra el judaísmo tradicional, trataba de conseguir el apoyo de las autoridades para lograr su cometido. Encabezando el esfuerzo se hallaba un cierto Sr. Karpos a quien las autoridades habían instalado como rabino en Odessa. Él había preparado una voluminosa tesis “demostrando” que la religión es el enemigo número uno de la civilización y concluía con la recomendación de que el estudio de Cábala y otros principios del Judaísmo sea proscrito. Se había trasladado a Petersburg para presentar sus “resultados” al gobierno. Mi padre recibió noticias acerca de estos procesos y me despachó a Petersburg para tratar el tema. Después de varios días en allí  no había hecho en absoluto ningún avance; todas mis conexiones y esfuerzos fueron en vano. Notifiqué a mi padre por telegrama que todos mis esfuerzos por detener Karpos habían fallado. Mi padre contestó que debía continuar insistiendo. Cuando algunos días más habían pasado sin resultado, tomé el tren a casa para informar a mi padre de lo desesperado de la situación.. Cuando entré en el cuarto de mi padre, él estaba preparándose para la Plegaria de la mañana; tenía el Talit plegado en su hombro y estaba examinando sus Tzitzit. Informé los eventos y los fallidos esfuerzos de los últimos días, y concluí diciendo que, como personalmente lo veía, no había absolutamente nada para hacer acerca de esta situación. Mi padre dijo: “Una vez Rabi Shneur Zalman de Liadi envió a su hijo, Rabi Dovber, a realizar cierta misión. Rabi Dovber volvió con las manos vacías. Cuando llegó, encontró a su padre con su Talit plegado en su hombro, mientras verificaba sus Tzitzit en la preparación para la Plegaria de la mañana. Rabi Shneur Zalman dijo: “¿Ves? Éste es un Talit. El Talit representa el nivel del Or Makif (“Luz Trascendente”), y la Luz Trascendente enceguece todas las fuerzas del mal” Al oír esto, Rabi Dovber besó el Tzitzit de su padre y se volvió. Esa vez tuvo éxito”. 

Sin otra palabra, tomé los Tzitzit de mi padre, los besé, y viajé en el próximo tren, de vuelta a Petersburg. De nuevo allí, empecé a atormentar mi cerebro. Entonces, tuve una idea. Fui al hotel de Karpos y pedí verlo. Karpos me recibió cálidamente- parece que había oído hablar de mí y de mi padre. Nos sentamos y hablamos, y le planteé el asunto de su disertación. Habló de sus planes. “Pronto veremos quién prevalecerá” desafió. “En poco tiempo, los del Movimiento Iluminista libraremos a los judíos de sus nociones y prácticas arcaicas. He preparado todo el material,” continuó alardeando, “ahora sólo tengo que hacer unos retoques y estará listo para someterlo a la Comisión Ministerial de Cultura y Religión de nuestro Zar, que tiene previsto revisar mi escrito en unos días. ¡Por fin lograremos nuestro cometido!”

 “¿Puedo ver lo que escribió?” pregunté.

 “Claro. No tengo nada que esconder- en cuestión de días, todo se decidirá” dijo el calumniador, mientras me alcanzaba su manuscrito. 

Sin decir una palabra, procedí a romper la disertación en pedazos. Karpos explotó de rabia y frenesí. “¡¿Qué está haciendo?! ¡Mis conferencias! ¡Mis notas! ¿Sabe cuántos meses invertí en la investigación y en escribir estos papeles?”! Continué rasgando el manuscrito en pedazos diminutos de papel. Mientras tanto él continuó bramando de rabia, maldiciendo y ridiculizándome. En su furia, me dio una rotunda bofetada en el rostro. Cuando terminé con sus papeles, corrí fuera del hotel y volví a Lubavitch.

Cuando salió de Europa, en medio de la Segunda Guerra Mundial, y llegó a América, no dudó en seguir con su lucha por mantener vivo el judaísmo.

…Cuando descendió del barco, aclaró la razón de su arribo allí: “no he venido a descansar, sino a trabajar, y muy duro, para darle re­novada vida al judaísmo de América”… dijo Rabí losef ltzjak Schneerson, sexto Rebe de Jabad a Nue­va York, en el año 1940.

Con sor­presa fueron recibi­das las palabras del Rebe, sobre sus intenciones de convertir a América en un lugar de Torá como lo ha­bía sido Europa. “El Rebe pidió que no nos avergoncemos de caminar por las calles con barba y Peot, pero eso se veía peor que circular con sombreros típicos de Turquía. Gracias al Rebe comenzaron a verse judíos con barba en las afueras de Nueva York, y con el pasar de los años esto se popularizó en todos los círculos en donde se estudiaba Torá”.

Dos días después de su llegada dijo Rabí losef ltzjak: “Ya hace 48 hs que lle­gué aquí y todavía no se fundó la Ieshivá TOMJEI TMIMÍM (de Lubavitch)”. Y ciertamente el Rebe instituyó la leshivá, y luego decenas de ellas se extendieron a lo largo de todo Estados Unidos.-

Rabinos y personalidades judías vinie­ron a convencerlo de que sus planes eran irrealizables.

El Rebe les contestó “¡América no es diferente!” En medio de esta revolución falleció, el 10 de Shvat de 5710. Su alma se elevó a los Cielos, y la tarea quedó en manos de su yerno, Rabí Menajem Mendl Schneerson, 7mo. Rebe de la di­nastía de Jabad, conocido simplemente como “El Rebe”.

Apretados

Tres semanas es mucho tiempo cuando estás esperando un e-mail. Pero toma todo el dolor y el tormento, todos los pecados y sufrimientos de una nación de 4.000 años y aprésalos en un espacio de tres semanas…y tres semanas son un espacio muy estrecho de hecho.

¿Cuándo «sucede» algo? Podemos decir que una guerra ocurre durante los años que ocupan un siglo en particular. Podemos decir que un cambio en la situación de una persona sucede en el curso de una generación o etapa. O, podemos ver las causas básicas de estos eventos y procesos.

Un momento único y traumático en la vida individual de uno, particularmente en la infancia de la persona o niñez, puede afectar numerosos sucesos «futuros», pensamientos y sentimientos, y puede conformar el estado mental de la persona y las circunstancias de su vida durante muchas décadas. Lo mismo es cierto con nuestras vidas como personas. Los eventos de dos días terribles en nuestros años de formación encapsulan un gran pedazo de nuestra historia y marcan la trayectoria de nuestro recorrido en el próximo milenio.

 

¿Cuáles son estos dos días, y qué sucedió?

 

El 17 de Tamuz

El día 17 del mes de hebreo Tamuz del año 2448 desde la Creación (1313 AEC), cuarenta días desde el Recibimiento de la Torá en el Monte Sinaí, Moshé descendió de la montaña, y se encontró con que los Hijos de Israel estaban adorando a un becerro de oro. En sus manos, llevaba las Tablas de la Ley, inscriptas en ellas los Diez Mandamientos. Al ver la traición del pueblo al nuevo pacto con Di-s, Moshé «tiró las Tablas de sus manos y las rompió bajo la montaña».

 

Di-s perdonó a Su pueblo, pero también dijo: «En el día de Mi contabilidad, Lo contaré». Nuestros sabios explican: cada pecado de la historia judía contiene un poco del pecado del becerro de oro; cada catástrofe de la historia Judía contiene algo de la catástrofe de la partición de las Tablas.

 

El 9 de Av

Era un pueblo herido, pero en estado de recuperación cuando acamparon desde el Monte Sinaí para volver a seguir su trayectoria hasta la Tierra Prometida. Y luego, en la víspera del día nueve del mes Hebreo de Av, un año y tres semanas después de la partición de las Tablas, la travesía de Israel se detuvo en seco.

Fue en esta trágica noche que nuestros ancestros, desanimados por el reporte negativo traído por los espías, perdieron la fe en la Divina promesa de la Tierra. Al final, Moshé una vez más aseguró el perdón de Di-s y reanudaron el viaje, pero una vez la naturaleza de la travesía fue profundamente alterada. Moshé y toda la generación que habían dejado Egipto y presenciaron la entrega de la Torá en el Sinaí, murieron en el desierto. Sus hijos anduvieron en el desierto durante 40 años, marcando un patrón que se repetiría en los futuros exilios de Israel.

 

Las tres semanas

Cerca de 1.400 años más tarde, estos dos días de traición y desesperación otra vez dejaron su marca en la historia Judía, remarcando las infames «tres semanas» en las que se vio la destrucción de Jerusalem y su Templo Sagrado y el comienzo de nuestro más reciente, más largo y más amargo Galut (exilio).

El 17 de Tamuz del año 3829 desde la Creación (69 EC), el ejército Romano que se encontraba sitiando Jerusalém, irrumpió en la ciudad destruyendo las murallas. Durante tres semanas las batallas arrasaron en las calles de Jerusalem, hasta que toda la ciudad fue destruida y el Templo Sagrado, el corazón de la ciudad y del pueblo Judío, ardió en llamas el 9 de Av.

Otras numerosas tragedias en la historia Judía, (tanto antes como después de la destrucción del Templo), ocurrieron el 17 de Tamuz y el 9 de Av, y durante las tres semanas que hay entre estas dos fechas. Hasta el día de hoy, estos dos días, este año correspondientes al 27 de junio  y 18 de julio de 2021 respectivamente, son días de ayuno, y las «Tres semanas» marcan un período de duelo y arrepentimiento.

 

El profeta Jeremías, en sus Lamentaciones por la destrucción de Jerusalem, proclama sobre el pueblo de Israel: «Todos sus perseguidores los alcanzaron entre las escaleras estrechas». Las «escaleras estrechas» explica el Midrash, son los «21 días entre el 17 de Tamuz y el 9 de Av».

 

Despegando

¿Qué sucede cuando tanto caos y fomento son apretados en un espacio tan estrecho?

Pregúntale a un jardinero qué sucede cuando pellizcas una manguera de jardín. Pregúntale a un ingeniero de láser qué sucede cuando un haz de luz es enfocado en un punto en particular. Pregúntale a un historiador qué sucede cuando las pasiones reprimidas de una persona se canalizan a través de la persona de un líder carismático.

 

Pregúntale a nuestros sabios: te dirán que el Mashiaj nació el 9 de Av. Te dirán que es la tarea de nuestra generación apretar cuatro mil años de anhelo y esfuerzo en la estrecha recta del Galut y llevar nuestro mundo a una órbita más alta: a un estado de bondad Divina y perfección prometida por los profetas de Israel.



Realidad Virtual

Hay una moda en el lenguaje, así como lo hay para todo. Una de las frases más en onda hoy día es: «Sé realista”. Ya sea para usarlo como manera de amonestación, o gentil o de exhortación, generalmente se solicita por la exasperación que la persona a quien le es dirigida dicha frase, se niega a «ver un motivo». El «motivo» en este caso, es que se niega a renunciar a los valores y tradiciones de hoy en día que han pasado la prueba del tiempo a cambio de las modas transitorias del momento. Es un «anticuado» porque rechaza nadar con un flotador, o irracionalmente se adhiere a ideas e ideales que fueron dados hace mucho tiempo y no conforman con las tendencias «modernas».

¿Qué es un realista? Un ingenioso una vez definió «realista» como «un optimista con experiencia». Esta descripción puede no ser tan cínica como parece.

Una lección valiosa de realismo puede ser aprendida de los eventos que llevó al la Festividad Jasídica de 12 Tamuz. Los hechos están bien documentados por el Rebe Anterior mismo. En resumen, está escrito que en el año 1927, las autoridades Soviéticas, con el propósito de eliminar todo judaísmo de la Unión Soviética, arrestaron al Rebe Anterior, Rabí Iosef Itzjak Schneerson, acusado de realizar actividades en contra del Estado, sentenciándolo con la pena de muerte. En un intento de promover una sociedad Divina y destruir la parafernalia de la observancia, vieron en el Rebe Anterior, y en sus seguidores, la amenaza más grande a sus diseños. Al remover al Rebe, pensaron, la observancia del judaísmo se acabaría. La malvada máquina Soviética que había derrocado al gran régimen Zarista, temía a un gran judío y a la influencia que él ejercía.

Encarcelado bajo terribles condiciones, torturado física y mentalmente, el Rebe Anterior tuvo que enfrentarse a una interrogación final por un comité de tres personas que decidirían su sentencia. Confinado en un gran cuarto, en donde al fondo se sentaban sus inquisidores, el Rebe, físicamente abusado y sufriendo de heridas de las cuales nunca se recuperó, caminó lentamente hacia ellos. Sin agacharse, inició su conversación diciendo: «Esta es la primera vez que entro a un cuarto y la gente no se pone de pie». Uno de los interrogadores se levantó gritando con fiereza: «¡Silencio» ¿Sabes donde estás?». Todavía caminando hacia ellos, el Rebe respondió: «¡Sí» Estoy en un cuarto que de acuerdo a la Ley Judía no precisa una Mezuzá: un establo o un baño».

El final del capítulo de esta historia es que el Rebe fue sentenciado con la pena de muerte. Debido a las protestas de los Gobiernos del exterior, la sentencia fue cambiada a la de exilio, y poco después de eso, el Rebe fue liberado.

Realísticamente, ¿no fue la actitud del Rebe Anterior un poco tonta? Él sabía que estos tres hombres tenían su vida en sus manos. ¿No hubiera sido mejor ser más conciliador? ¿Comprometerse un poco menos? ¿Vivir la lucha otro día?

El Rebe Anterior era realista: un optimista con experiencia.

Su optimismo yacía en su fe. Tenía perfecta fe. En sus propias palabras, en una ocasión anterior, tenía «un Di-s y dos mundos». “y no podía ser intimidado por aquellos que «tenían muchos dioses y un solo mundo». Y su experiencia le dijo que no cedería a los compromisos o tratos de aquellos que buscaban eliminarlo. Al hacerlo, uno solo ayuda a cumplir con su agenda: uno se convierte en su agente en destruir lo que buscaban destruir. Su experiencia también le dijo que en el milenio anterior, grandes imperios más grandes que la Unión Soviética buscaron eliminar a la Nación Judía y habían fallado: habían perecido y el Pueblo Judío sobrevivido.

Un capítulo terminó, pero la historia continúa. El Rebe Anterior, dejó la Rusia Soviética poco después de esto, pero sus Jasidim, bajo el dolor de la muerte, continuaron con su trabajo y mantuvieron la llama del Idishkait viva y encendida. El Rebe primero se mudó a Riga, luego a Varsovia en donde experimentó los horrores Nazis. Finalmente se fue a EEUU.-. Él, y su futuro yerno y sucesor, inspirados por miles de hombres y mujeres jóvenes, muchos de ambientes seculares y asimilados, con su visión, propósito y liderazgo ayudaron a revitalizar a la condición Judía en todo el mundo luego de la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto.

La Unión Soviética se desintegró, y la práctica y la enseñanza judía una vez más prosperaron. En la época de su sucesor, el Rebe, Rabí Menajem Mendel Schneeron, se crearon imperios que siguen creciendo, llegando a miles de miles de judíos en todo el mundo. Es realmente un «Imperio en donde el sol no se oculta nunca», un imperio creado no por temor ni fuerza, sino por amor e iluminación, no con compromiso sino con compasión.

Al hacerlo, un nuevo mundo ha sido agregado al lenguaje inglés, y al léxico del mundo: Alcanzar. Traducido en muchos idiomas, connota amor, auto sacrificio, bondad y caridad.

Desafortunadamente, incluso con una perfecta retrospectiva, hay aquellos que no perciben la imagen con claridad. Constantemente buscan por encima de sus hombros para ver lo que el «mundo» dice. No pueden discernir la diferencia entre lo que es real, fantástico o falso. Comparando esto con la perspectiva de la Torá, la perspectiva del Rebe: Mirar siempre hacia adelante, mantén tus ojos firmes en el camino que llevan a la última meta, nunca desviándose a la izquierda ni a la derecha. Entonces, es adquirible e inminente. ¿Cuál es el camino correcto? ¡Examina los hechos! ¡Sé realista!

Por Ben Tzion Rader



Un amor proveniente de una relación de odio

En esta Parshá, leemos sobre Balak, el rey de Moab, quien está mortalmente asustado de los judíos que se encontraban acampando justo en el límite de su nación. La Nación Judía había logrado sin esfuerzo defenderse y conquistar las tierras adjuntas de los dos grandes reyes Amoritas, Sijón y Og, y Balak temía que su tierra fuera la siguiente. Así que mandó a llamar a Balaam, un brujo y profeta no judío, y lo contrató para maldecir a los inminentes invasores. Su plan fue contraproducente ya que Di-s transformó las maldiciones de Balaam en una cascada de elocuentes bendiciones.

Es interesante no obstante, que los temores de Balak no tuvieran fundamentos, y sus esfuerzos fueron en vano. Ya que él no sabía que Di-s había instruido a los judíos que «No provoquen una guerra con los Moabitas» (ya que Moab era un prometido como heredero para los descendientes de Lot). Ahora, mientras que no se le podía echar la culpa a Balak por no saber sobre este edicto Divino emitido a los judíos, Balaam, un profeta que «escuchó los dichos de DI-s y percibió los pensamientos del Altísimo» sabía sobre la neutralidad que debían mantener los judíos con los Moabitas.¿Por qué no le aconsejó a Balak: «Amigo, tu tranquilidad no debe ser perturbada; los Judíos no suponen ninguna amenaza»?

Es precisamente esta pregunta la que lleva al comentarista bíblico Rashi concluir con que «Balaam detestaba a los judíos más que Balak». Balak odiaba a los judíos, pero por buenas razones; en su estimación, ellos presentaban una amenaza mortal para él y para sus ciudadanos. Balaam, por el otro lado, como muchos antisemitas en el correr de los siglos, odiaba a los judíos sin motivo alguno. Era un odio esencial que iba más allá de la razón, un odio que era cualitativamente mayor que el del Balak. Y como tal, aprovechó la oportunidad de maldecir a los judíos, aunque sabía muy bien que el temor de Balak era infundado.

Di-s no previno a Balaam de dirigirse a los judíos; ni siquiera reemplazó las maldiciones de Balaam con nuevas bendiciones. En vez de eso, Él «transformó la maldición en bendición». Como explica el Talmud, las bendiciones de Balaam eran en verdad las mismas maldiciones que él intentaba pronunciar…pero ligeramente re fraseadas para transformarlas en bendiciones.

El transformar un odio lógico (del estilo de Balak) en amor, hará que ese amor también sea lógico; un amor basado y medido de acuerdo a las cualidades y valor del que es amado. Pero transformar un odio completamente infundado e ilógico en amor, traerá como resultado las bendiciones de Balaam: una efusión de amor infinito y esencial. Un amor que trasciende toda lógica y razón, el amor que Di-s alberga por cada uno y uno de Sus hijos.

No es sorprendente entonces, que las bendiciones de Balaam sean un vehículo para la profecía sobre la redención Mesiánica: «La veo, pero no ahora; la observo, pero no pronto. Una estrella (el Mashíaj) ha salido de Iaakov, (…)…e Israel triunfará»Ya que será durante la Era Mesiánica, que el amor esencial e infinito de Di-s por Su pueblo, como fue expresado en las bendiciones de Balaam, finalmente se manifestará».

Por Naftali Silberberg



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La liberación

Guimel Tamuz, el tercer día del mes de Tamuz, es aquel en que el Rebe Anterior, Rabí losef I. Schneerson, sea su memoria bendición, fue liberado por las autoridades rusas en 5687 (1927), de una sentencia de prisión amenazadora de vida. A él se le permitió abandonar la prisión a condición que sirviera tres años de exilio en la ciudad de Kostramá.

Mientras se encontraba en Kostramá, nueve días más tarde, el día 12 de Tamuz, el Rebe fue notificado que esta sentencia también había sido revocada y que él era ahora un hombre libre. El 13 de Tamuz recibió los documentos oficiales atestiguando que estaba verdaderamente libre.

Como el día de su liberación de real encarcelación, Guimel Tamuz posee varios aspectos jubilosos, más grandes aún que el júbilo experimentado en los días 12 y 13 de Tamuz:

La liberación del 12 y 13 de Tamuz consistió en la liberación de un estado de exilio, mientras Guimel Tamuz consistió en la transformación de un estado de confinamiento y encarcelación a una condición de libertad relativa. Pues cuando alguien es aprisionado, él no tiene absolutamente poder sobre sus acciones; todo está en manos de sus carceleros.

Esto fue especialmente cierto en el caso del Rebe Anterior quien al principio fue sentenciado a muerte; aún después que la sentencia drástica había sido reducida, era enteramente posible para la sentencia, ser vuelta a invocar mientras el Rebe estaba en prisión.

Siendo esto así, ¿por qué son sólo los días 12 y 13 de Tamuz celebrados como un lom Tov?¿Por qué no estableció el Rebe Anterior Guimel Tamuz como un lom Tov también?

El Rebe Anterior no estableció Guimel Tamuz como un lom Tov dado que el aspecto y ser de un líder y pastor del pueblo judío, es de proveer para su generación sus propias necesidades, mientras que sus asuntos personales son de mucha menor importancia. Dado que Guimel Tamuz fue una liberación personal, es decir, su exilio a Kostramá limitó su capacidad para influenciar y proveer para su generación, él por lo tanto no estableció Guimel Tamuz como un lom Tov.

Sin embargo, el lazo de jasidim a un Rebe y Nasí es tal que abarca todos los aspectos del ser del Rebe, aún sus asuntos «personales» se relacionan con todo el pueblo judío. Es por lo tanto apropiado para los jasidim celebrar también Guimel Tamuz.

Dado que, como el Baal Shem Tov enseña, todo tiene lugar por Providencia Divina individual, eventos significativos que acontecieron en Guimel Tamuz en el pasado, son vueltos a despertar y experimentarlos anualmente, se relacionan también con la liberación del Rebe Anterior el tres de Tamuz.

¿Qué evento prominente tuvo lugar en este día? El tres de Tamuz, lehoshúa detuvo el sol en su órbita cuando él dijo, «Sol, estáte quieto, [literalmente, «cállate»,] en Guibón». Nuestros Sabios explican que lehoshúa ordenó al sol – la fuerza angélica que es la fuente y contraparte espiritual del sol – cesar de cantar las alabanzas de Di-s, lo que a su vez causó a la órbita del sol, su «reverencia» delante de la Presencia Divina, cesar también.

lehoshúa pudo hacer así, demostrando la superioridad espiritual de los cánticos cantados por el pueblo judío sobre los cánticos de los ángeles. Así el Midrash declara que, cuando lehoshúa ordenó al sol cesar su canto, éste respondió: «Tú estás ordenándome estar callado. ¿Quién, entonces, cantará las alabanzas de Di-s?» Respondió lehoshúa: «Tú mantente callado, yo cantaré Sus alabanzas».

El aspecto de canto es el elemento de ratzó y shov, avance y retiro – notas más altas y más bajas en la escala musical – delante de la Divinidad. Este ratzó y shov resultan del amor a Di-s y el temor reverente a El, de uno. Amor a Di-s causa a la persona ser despertada con un deseo de avanzar y acercarse a Él, mientras temor reverente engendra un sentido de retiro y retraimiento.

Ambos, el amor y temor reverente que una persona siente, son el resultado directo de la comprensión de la persona de la grandeza de Di-s; más uno entiende Divinidad, más grande su sentido de amor y temor reverente a Él. Esta comprensión es lograda a través de estudiar los aspectos interiores de Tora, revelados en su forma más comprensible en Jasidut.

Éste, también, fue el tema de la liberación del Rebe Anterior: Como resultado de ocuparse él mismo de fortalecer Torá y difundir judaísmo, incluyendo su corazón más íntimo – aquél de enseñar y difundir la parte más íntima de la Torá – el Rebe (Anterior) pudo prevalecer sobre el mundo material. Así, no sólo ciertamente materias corpóreas – hasta e incluyendo cuerpos celestes – no estorban su obra, sino por el contrario, ellos lo asistieron en sus esfuerzos santos.

En su benevolencia, el Rebe atrajo hacia abajo este mismísimo poder a todos los judíos, para que ellos también puedan prevalecer sobre lo material y transformarlo en lo espiritual.

Basado en Likutéi Sijot, Vol. IV, págs. 1314-1316.



¡Stop!, ¡Basta de chismes!

Cada vez que bajo a tomar el subte, doy una mirada a los títulos de los diarios del dia y a las revistas que se exhiben en el kiosco del andén. Aumenta día a día la tendencia en muchos títulos y encabezados de diarios, mencionando temas que solían ser solamente comentarios de revistas que, hace años se llamaban “chismes”. Por su parte, las revistas que tratan temas de economía y de política cada vez más publican títulos y fotos de tapa que las asemejan a las revistas “chismosas”, para atraer la mirada del público y el consumo.

 

Las revistas en general, ya casi no se diferencian entre sí; aunque su temática principal sea distinta, cada vez más incluyen en sus contenidos los asuntos privados de la vida de actores, modelos, deportistas, y políticos, principalmente describiendo sus desdichas y problemas con lujo de detalles y publicando fotografías que testimonian esas situaciones negativas.

 

Se podría decir que el modo de presentar las noticias se ha ido “igualando para abajo”, ya que hasta el diario más “serio” ha creado una ventana a través de la cual todos los lectores pueden chusmear los asuntos privados de las personas que hoy en día se llaman “mediáticas” (palabra usada para nombrar a la persona expuesta de turno).

 

Esto se puede ver también en las publicaciones de estos mismos medios en internet, donde, para que la gente pueda acceder con un simple click a esta clase de contenidos, se les da un lugar importante.

 

Me sorprende muchas veces escuchar, hasta en las conversaciones entre hombres adultos, cultos y con ocupaciones importantes, comentarios acerca de las intimidades de tal o cual artista, periodista o deportista, como en mi adolescencia escuchaba solamente cuando acompañaba a mi mamá a la peluquería, pero actualmente expresados con menos benevolencia, ya que los asuntos no se mencionan mostrando empatía con la desdicha ajena, sino simplemente como parte de un pasatiempo de actualidad que incluye el comentario trivial, la crítica y la exageración.

 

¡Que hermosas son tus tiendas Iaacov, tus moradas, Israel! menciona el versículo en la Parshat Balak, señalando que las puertas de las carpas estaban orientadas de manera de no coincidir entre sí para que las familias estuvieran a resguardo de miradas ajenas y no cundiera el chisme. En la Parshat Behaalotejá, Aharón y Miriam critican entre ellos la vida privada de Moshé, por haberse éste separado de su esposa. Hashem los reprende y castiga a Miriam con una enfermedad de la piel (Tzaráat) que la obliga a estar separada del pueblo durante 7 días y a detener la marcha del mismo en su travesía por el desierto.

 

Las fuentes mencionan que el castigo por hablar mal de otras personas es esta enfermedad, de apariencia similar a la lepra. También dicen que se considera Lashón ha Rá (hablar del mal) cuando la conversación no se realiza para ayudar al que está en desgracia, cuando no tiene un objetivo de reparación, cuando se realizan críticas que no ayudan a la persona en cuestión porque se hacen a sus espaldas y cuando tiene solamente el objetivo del chisme, o sea la difusión de una situación ajena que no trae ningún beneficio al damnificado, sino todo lo contrario, ya que muchas veces disminuye su buen nombre y honorabilidad, aunque no sea esa la intención de los que hablan.

 

Maimónides menciona a esta erupción que deja manchas blancas en la piel del enfermo y que contamina también sus ropas y su casa, diciendo que se ha producido un desequilibrio en sus aspectos espirituales y que esta alteración se manifiesta como lepra.

 

El desequilibrio impulsa a la persona a hacer estos comentarios y a su vez, hablar del otro, profundiza el desequilibrio espiritual. Podría decirse que es una enfermedad Espíritu-psico-somática. También señala el Rambam que los efectos espirituales que provoca la acción de hablar sobre los males de los demás son muchos, como por ejemplo que las mitzvot positivas acumuladas del mal hablante, pasan a favor del perjudicado y que las negativas acumuladas por éste, pasan al chismoso, como una forma espiritual de indemnización. También menciona que el daño causado por el chisme o comentario sobre otros, sin objetivos de ayudar o reparar, se extiende al que habla, a sus hijos y al que escucha.

 

Sí enfatiza en cambio, que cuando una persona cree que puede ayudar a otra, puede buscar consejo con alguien que colabore o lo oriente en la ayuda que desea brindar a la persona en cuestión, absteniéndose de comentarlo con terceros que no participarán del asunto.

 

Cuando estaba investigando para escribir esta nota, sentí escalofríos pensando que, si nos dejáramos envolver por la tendencia actual, estaríamos todos hablando Lashon HaRá; por lo tanto tratemos de estar atentos, trabajar para mantener nuestro equilibrio espiritual y sobre todo, para enseñar a los más jóvenes a no desperdiciar tiempo y energías en tan inútil pasatiempo.

 

Dra. Beatriz Literat