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Miriam Kapeluschnik
Editora
parecía recordarlo a él. Inme-
diatamente aceptó la solicitud
del Rebe y compró un nuevo
boleto para el fin de semana.
Fiel a su palabra, Lipshitz vi-
sitó al hombre varias veces du-
rante el Shabat y trató de
levantarle el ánimo.
El domingo, fue convocado a
una audiencia privada con el
Lipshitz, rabino de Jabad, Rebe, que enfatizó la importan-
encabezaba una organización cia de lo que había hecho y de-
que apoya a las instituciones rramó sobre él bendiciones por
educativas en Israel. su esfuerzo.
Viajó para asistir a un evento El 11 de Nisan es el cumplea-
de recaudación para su funda- ños 123 del Rebe, que dedicó su
ción. Iba a pasar Shabat en Ca- vida a las grandes instituciones,
nadá y compartir sus historias a las magníficas causas, a reci-
con los lugareños. bir a los líderes más poderosos e
Pero el Rebe de Lubavitch influyentes y a mediar en temas
tenía otros planes… de delicadísima seguridad na-
Antes de partir hacia Ca- cional. Pero sin descuidar por
nadá, el secretariado del Rebe lo un instante al individuo, hom-
llamó y le asignó una misión. bres, mujeres y niños. Judíos y
Un antiguo compañero de no judíos. Sin dejar de preocu-
clase suyo, se sentía solo y mise- parse por el individuo, como lo
rable y el Rebe quería que Lips- hizo con el amigo de Lifshitz.
hitz se quedara en Nueva York Tomemos esta enseñanza y
durante el Shabat, visitara la casa procuremos estar presentes
del hombre varias veces y tratara junto a quienes nos necesitan.
de mejorar su estado de ánimo. Es el mejor regalo de cumplea-
Lipshitz no recordaba a este ños para nuestro querido Rebe.
compañero tanto como éste Pesaj Kasher VeSameaj!!!!
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