Page 21 - ESENCIA 041
P. 21
stá bien documentado en En su casita, en un suburbio de
los archivos que ya no son Moscú, mi tío y mi tía horneaban
Esecretos de la KGB que los Matzá.
soviéticos estaban en contra de Mi memoria guarda una ima-
toda religión. gen de la tía Pesia, con un pañuelo
Pero eran particularmente into- de flores cubriéndole el pelo, de
lerantes con los judíos observan- pie frente a la mesa, mientras que
tes de la Torá. el tío Jatche, con el rostro enmar-
Durante la Segunda Guerra cado por su barba con mechas gri-
Mundial, la Rusia soviética libró ses y una kipá negra en la cabeza,
sus grandes batallas no solo con- estaba de pie frente al horno de
tra los nazis del exterior, sino tam- ladrillo caliente.
bién contra los judíos del interior. Ella hizo rodar la masa, él la
En esos tristes años, observar cogió con una pala y la puso en el
Shabat, tocar el Shofar en Rosh rollo. Y, he aquí, del horno salió una
HaShaná, estudiar Torá, hornear Matzá crujiente y deliciosa. ¡Para
Matzá y celebrar Pesaj ponía a mí, eso fue un milagro del cielo!
quienes lo hacían en peligro inmi- Cuando llegó Pesaj, mi padre,
nente de ser señalados como con- mi tía, mi tío y todos los niños tu-
trarrevolucionarios culpables de vimos un Seder secreto con Matzá,
traición y enviados a campos de vino y las Cuatro Preguntas.
trabajos forzados. Pero a medida que los nazis
Sin embargo, hubo almas in- avanzaban hacia Moscú, aumen-
transigentes devotas al judaísmo, taba el peligro de que los aviones
mi tío Jatche y mi tía Pesia entre alemanes volaran cada vez más
ellos, que continuaron viviendo cerca de nuestra ciudad natal, por
una vida de Torá dentro de la lo que, junto con otras familias
Rusia comunista a pesar del peli- con niños pequeños, fuimos eva-
gro. cuados a Siberia.
ESENCIA 19