El comienzo del fin

Los días 8, 9 y 10 de Tevet se consideran días oscuros en la historia de Israel.

En un momento dado, cada uno de los tres días se observó mediante un ayuno. Hoy ayunamos solo el décimo.

El 8 de Tevet marca la finalización de la traducción de la Biblia al griego, conocida como la Septuaginta.

El 9 de Tevet marca el fallecimiento de Ezra y Nejemia, quienes llevaron a los judíos exiliados en Babilonia de regreso a Jerusalém.

El 10 de Tevet marca el comienzo del asedio babilónico de Jerusalém en el año 586 a. C.

Ptolomeo II gobernó la Tierra de Israel con una actitud amistosa hacia sus súbditos judíos. Era gran amigo de los libros y su gigantesca biblioteca contenía cientos de miles de volúmenes de todos los autores de la antigüedad.

Por sugerencia de sus bibliotecarios, se acercó al pueblo judío para obtener una traducción al griego de la Biblia. Eleazar, el Sumo Sacerdote, que estaba a la cabeza del estado de Israel, le envió a setenta de los más grandes sabios judíos. Conocían bien el idioma griego y todos los significados e interpretaciones del texto de la Biblia en la tradición escrita y oral.

Cuando llegaron a su palacio, el rey Tolomeo les dio una bienvenida real. Los honró con fiestas y regalos. Luego los envió a una pequeña isla cerca de Alejandría. Allí, colocaron a cada Sabio en una habitación separada. “Escríbeme la Torá de Moshé, tu maestro”, les ordenó a cada uno. Debían traducir la Biblia al griego, confinados en sus habitaciones. No podían comunicarse entre sí. Milagrosamente, cada traducción individual estuvo de acuerdo en todos los puntos, incluso en los pasajes más difíciles.

Hubo varios lugares donde cada Sabio alteró intencionalmente la traducción literal. Sin embargo, al final, todos hicieron los mismos cambios. El gobernante egipcio y sus eruditos estaban asombrados por la proeza milagrosa, y honraron con razón a los eruditos al finalizar la traducción.

La “Septuaginta” (latín para setenta) se convirtió en uno de los documentos más importantes de la literatura judía y mundial. Contiene no solo todos los libros de la Biblia, sino también obras no incluidas en la Biblia que se perdieron en gran parte en su hebreo original.

Los judíos de Egipto estaban muy contentos con esta traducción de la Biblia al griego. Durante muchos siglos celebraron el día de la finalización, el octavo de Tevet, como fiesta judía. Pero los Sabios de Israel consideraron el 8 de Tevet como un día de dolor para el pueblo judío. Todos vieron un acto asombroso de Di‐s en él.

Sin embargo, se consideró un día tan trágico como el día en que se hizo el becerro de oro.

Según el Talmud, el asunto se comparó con un león capturado y encarcelado. Antes de su encarcelamiento, todos temían al león y huían de su presencia.Una vez encarcelado, todos se acercaron y le dijeron: “¿Dónde está su fuerza?” Mientras la Torá estuvo en manos de Israel y fue interpretada por los Sabios en su propio idioma, el hebreo, evocó reverencia y muchos temían mancharla. Una vez que la Torá fue encarcelada en la traducción griega, fue como si la Torá fuera despojada de reverencia. Quienquiera que lo deseara podía ahora venir y mirarla.

5 de Tevet – Didan Notzaj


El juicio por los libros de Agudat Jasidei Jabad, comenzó el 19 de Kislev de 5746 (1986) ante el juez Charles Simphson y se extendió por tres semanas.

El 5 de Tevet de 5747 (1987) se dio a conocer el fallo del juez en un expediente de 40 páginas. El juez tomó declaración a los jasidim de Jabad, alegando que toda la vida del Rebe Iosef Itzjak, anterior Rebe de Lubavitch, fue dedicada y consagrada por completo a la comunidad, por lo tanto declaró su biblioteca como pública y perteneciente a la asociación de Jabad Mundial, al considerar que los libros del Rebe no formaban parte de su patrimonio personal en el momento de su fallecimiento.

El demandado fue obligado devolver los libros y demás objetos del Rebe Anterior, que se encontraban en su poder y fueran tomados sin autorización.

La noticia de la victoria se difundió rápidamente en todo el mundo, y en cada lugar donde se escuchaba, los jasidim lo celebraron con mucha alegría.

El mayor festejo se vivió en la central de Jabad, “770”, donde miles de personas se reunieron para festejar la gran victoria. El punto máximo de alegría fue luego de la plegaria vespertina, realizada con la melodía propia de los días festivos y luego de la cual el Rebe pronunció un discurso especial, en el que entre otras cosas dijo: “… así como en el momento de la encarcelación y liberación del Alter Rebe, el mismo protagonista aprendió de todos los acontecimientos, una instrucción para su servicio a Di‐s y una de sus conclusiones fue la de aumentar en la difusión de los manantiales del jasidut hacia fuera.

A la luz de todo esto, queda clara la eterna indicación Divina relacionada con el acontecimiento actual, pues justamente de la demanda y las acusaciones parecería que la agrupación de jasidim de Jabad no es un cuerpo vivo y activo, justamente de esto debemos aprender que debemos fortalecer más la difusión del jasidut, y el estudio particular y general con mucha alegría y fervor…”

El día 5 de Tevet, es el día de la victoria de la luz sobre la oscuridad

¿Que significa “Macabeo”?

Macabeo se ha convertido en sinónimo del pequeño grupo de luchadores judíos que liberaron a Iehuda, de los conquistadores sirio‐griegos durante la saga de Januca en el período del Segundo Templo. Este término se aplicó originalmente solo a Iehudá, quien dirigió el grupo después de la muerte de su padre, Mati‐ tiahu, y en los primeros escritos se hace referencia a él como “Iehudá Macabeo”
 

Quizás la explicación más conocida es que la palabra “Macabeo” se compone de las letras iniciales del versículo que el pueblo judío cantó después de que Di‐s dividió el mar: “Mi kamoja baeilim Hashem, “¿Quién es como Tú entre los valientes, Oh Di‐s. ”· Se dice que esta frase fue el grito de batalla de los Macabeos, escrito en sus estandartes y escudos. 

· Algunos explican que la palabra “Macabeo” está relacionada con la palabra griega “fuerte” o “luchador”.

· Otros exponen que proviene de la palabra hebrea para “martillo”, makav, ya sea porque Iehudá era el “martillo de Di‐s”, sus rasgos se parecían un poco a los de un martillo, o porque su ocupación anterior era la de herrero.

· Algunos sugieren que proviene de la palabra hebrea mejabe, que significa “extinguir”. Los macabeos se esforzaron por apagar el fuego de los griegos, que sembró la muerte y la desolación por toda la tierra de Israel.

· El padre y patriarca de la familia era Matitiahu el Cohen (“Sacerdote”). Por lo tanto, algunos explican que la palabra Macabeo era en realidad un acrónimo de las letras iniciales de su nombre, Matitiahu Cohen Ben (hijo de) Iojanan.

· Los maestros jasídicos explican que los 2 versículos conectados con “Macabeo” denotan la presencia de Di‐s en el mundo.

Y en última instancia, de lo que se trata Ja‐ nuca: traer luz y santidad a la oscuridad, un proceso que se completará con la llegada del Mashíaj. ¡Que sea pronto en nuestros días!