Vaierá – Di-s se revela a sí mismo

Resumen de la parashá. Por Chani Benjaminson

Abraham acaba de ser circuncidado a los 99 años, una edad nada fácil para pasar por esto. Entonces Di-s envía un sol muy, muy caliente para que nadie viaje y se detenga en la casa de Abraham para molestarlo mientras se recupera.

Pero Abraham está molesto porque no hay invitados ese día y se sienta en una de las entradas de su tienda, esperando que alguien venga para poder cumplir con la mitzvá de tener invitados en su casa.

Entonces Di-s envía tres ángeles vestidos de hombres a Abraham y Abraham, emocionado, corre a prepararles una deliciosa comida. Uno de los ángeles anuncia que, dentro de un año, Sara tendrá un hijo. Sara escucha esto y se ríe; ¡recuerde que tenía 89 años!

Los otros ángeles reciben una misión de Di-s: tienen que destruir la ciudad de Sodoma, porque está llena de gente malvada que roba, mata y hace muchas cosas malas. Abraham reza a Di-s y le pide que salve la ciudad, pero, por desgracia, no hay gente justa por cuyo mérito la ciudad pueda ser salvada. Pero los ángeles salvan a Lot, el sobrino de Abraham que se había mudado a Sodoma, y ​​a su familia. Mientras los conducen fuera de la ciudad, les advierten que no miren hacia atrás, pero la esposa de Lot mira hacia atrás y se convierte en una columna de sal. La ciudad de Sodoma se da vuelta y desaparece para siempre.

Abraham y Sara se mudan a Gerar, donde Sara es tomada nuevamente cautiva, esta vez por el rey Avimelej , pero Di-s se revela a este rey en un sueño y le advierte que libere a Sara, y él lo hace. Poco tiempo después de este evento, Di-s recuerda Su promesa a Abraham y Sara, y Sara queda embarazada y tiene un hijo al que llaman Itzjak-Isaac como Di-s les dijo que hicieran.

Cuando Isaac cumple ocho días, hacen una gran fiesta y lo circuncidan. Todos ven el gran milagro que Di-s ha hecho: ¡Sarah parece una joven de 20 años!

Abraham era un hombre muy especial que amaba mucho a Di-s, y para probar su amor, a lo largo de los años Di-s le envió diferentes pruebas.

En esta parashá aprendemos que Di-s le envía a Abraham la décima y más difícil de todas las pruebas: ¡le ordena que lleve a su hijo Isaac como sacrificio! Abraham no llora ni se queja, toma a Isaac, ensilla su burro y se dirige al monte Moriá . Allí, el propio Isaac no se queja y deja que su padre lo ate al altar. En ese momento, un ángel detiene a Abraham y le dice que esto era solo una prueba, por lo que Abraham sacrifica un carnero en su lugar y guarda los cuernos para el futuro.

El Monte Moriah es la montaña en la que se construyeron los Templos Sagrados, hoy conocido como Monte del Templo . Al final de la parashá leemos que nace Rebeca , la hija de Betuel , el sobrino de Abraham .

 

¿Quiénes son las Matriarcas?

Por Shlomo Nudelman

Las matriarcas judías, también conocidas como “ imahot ” (hebreo: אִמָּהוֹת), son las cuatro mujeres fundadoras del pueblo judío:

Sara
Rivka (Rebeca)
Rajel (Raquel)
Lea

Sus vidas y acciones están registradas en la Biblia, específicamente en el Libro del Génesis, donde jugaron un papel crucial en la formación de la nación de Israel, junto con sus maridos, los tres patriarcas, Abraham , Isaac y Jacob. Sara , que estaba casada con Abraham, fue la primera de las cuatro madres del pueblo judío. Rebeca era la esposa del hijo de Sara, Isaac. Y Lea y Raquel estaban casadas con el hijo de Rebeca, Jacob .

¿Qué hicieron las Matriarcas?
Cada una de las matriarcas judías tuvo un profundo impacto en la formación y la base espiritual del pueblo judío.

Sara, a través de su fe y del nacimiento milagroso de Isaac, aseguró la continuidad del pacto de Abraham con Di-s. Después de que nació su hijo, supervisó celosamente su crianza, incluso tomando la difícil decisión (aprobada por Di-s ) de despedir a su hijastro, Ismael.

Rebeca, cuya bondad innata la convirtió en la pareja perfecta para Isaac, consiguió la bendición de primogenitura de su esposo para su hijo, Jacob.

Raquel, tras sufrir infertilidad, murió al dar a luz a su segundo hijo. Por ello, Raquel es personificada como la quintaesencia de la maternidad, que se sacrificaría por sus hijos a lo largo de los siglos.

Lea, a pesar de las pruebas personales y de no ser amada por Jacob tanto como su hermana Raquel, engendró seis de las 12 tribus de Israel, dando forma significativa a la nación.

¿Cuál es la fuente de las cuatro Matriarcas?
Según el Talmud , hay tres Patriarcas y cuatro Matriarcas. El número de Patriarcas tiene sentido, porque son tres hombres que son los antepasados de todos los segmentos del Pueblo Judío, a diferencia de los hijos de Jacob, los progenitores de 12 tribus únicas.

Pero las matriarcas son diferentes. Tanto Raquel como Lea dieron a luz a sólo algunas de las 12 tribus, siendo Lea la madre de seis y Raquel la madre de dos. Hay cuatro tribus adicionales que descienden de las concubinas de Jacob, Bilha y Zilpa.

Entonces, ¿por qué hay cuatro matriarcas? ¿No deberían ser dos (Sara y Rebeca) o seis (Sara, Rebeca, Raquel, Lea, Bilha y Zilpa)?

El Talmud responde que la designación de Patriarca o Matriarca no se basa (estrictamente) en la ascendencia sino en la prominencia. Fueron estas cuatro grandes mujeres las que formaron la base espiritual sobre la que se construyó nuestra nación.

Resumen de Lej Lejá

Abraham fue la primera persona en darse cuenta de que Di-s es un Ser Supremo y que Di-s no es polvo, un ídolo, el mar o el sol. Él difunde este mensaje todo el tiempo en la ciudad de Jarán donde vive. Un día, Di-s le dice que abandone su ciudad y la casa de su padre y que vaya a la tierra que Di-s le mostrará. Entonces Abraham y su esposa Sarai junto con su sobrino Lot dejan Jarán y viajan a la Tierra de Canaán donde Di-s se le revela y le dice que dará esta tierra a los hijos de Abraham. Abraham construye un altar allí.

A Abraham y Sarai les encanta recibir invitados. Su carpa está abierta por los cuatro costados para que la gente pueda entrar desde cualquier dirección en la que viajen. Abraham y Sarai alimentan y cuidan a todos sus invitados y les enseñan acerca de Di-s.

Poco tiempo después, una hambruna llega a la tierra de Canaán, por lo que Abram y Sarai tienen que viajar a Egipto para conseguir comida. Allí dicen que son hermanos, porque Sarai es tan hermosa que Abram teme que los guardias del palacio lo maten para dársela al Faraón como esposa. Sarai es llevada prisionera al palacio, pero durante la noche Di-s envía una plaga al Faraón, quien recibe el mensaje y libera a Sarai. También les da muchos regalos: animales, oro y plata, y los despide.

De regreso a Canaán , Lot se va a vivir a la ciudad de Sodoma. Es capturado durante una guerra local y Abraham corre a rescatarlo con un pequeño ejército y milagrosamente derrota a un gran ejército de cuatro reyes. Di-s hace un pacto con Abraham y le dice que sus hijos sufrirán en el exilio ( galut ), pero luego serán liberados y llevados a la Tierra Santa, que será suya para siempre.

¿Suena bien? ¡Suena genial! Pero… Abraham y Sarai estuvieron casados ​​por mucho tiempo y no tenían hijos, y ellos están envejeciendo… así que Sarai anima a Abraham a casarse con su sirvienta Agar , quien era una princesa egipcia convertida (en esa época a los hombres se les permitía casarse con más de una esposa), para darle a Abram la oportunidad de tener un hijo. Agar queda embarazada y tiene un hijo, Ismael . Pero Agar le falta el respeto a Sarai y huye, luego regresa a la casa de Abram después de que un ángel la convence de regresar.

Finalmente, Di-s le promete a Abraham que sus hijos serán tan numerosos como las estrellas del cielo y el polvo de la tierra. Di-s hace un pacto con Abraham y le ordena que se circuncide (haga un brit milá ) como señal del pacto. A partir de ese día, todos los niños judíos hacen un brit milá a los 8 días de nacidos. Di-s cambia el nombre de Abram a Abraham y el de Sarai a Sara y le dice a Abraham que tendrán un hijo al que deberán llamar “ Isaac ” y que de Isaac surgirá la nación a la que Di-s prometió la Tierra Santa. En ese momento, Abraham tiene 99 años y Sara 89.

Mar – Jeshván

Jeshván es el segundo mes del año contando a partir de Tishrei, y el octavo desde Nisán.

En las Escrituras se lo denomina Bul, como declara el versículo (1 Reyes 6:38): “Y en el undécimo año, en el mes de Bul, que es el octavo mes, la Casa [Templo] estaba terminada“.

Rashi comenta que se lo llamó Bul pues en este mes la hierba se marchita [balé] en los campos y se mezcla [bolelin] el grano para el ganado doméstico.

El Radak (Rabí David Kimji) relaciona el término Bul con la palabra iebulproducción-, ya que durante este mes comienza el arado y la siembra en la Tierra de Israel.

Algunos comentaristas explican que Bul deriva de la palabra mabúl diluvio-, ya que en este mes comienzan en Israel las lluvias copiosas. El Midrash señala que para el mes de Jeshván se decretó una abundancia de lluvias debido a que en él comenzó el diluvio en la época de Noaj.

Sin embargo, el nombre comúnmente aceptado para este mes es “Jeshván” porque ése fue el que emplearon los judíos al regresar de Babilonia“. [Nuestros Sabios señalan que los judíos trajeron consigo nuevos nombres para los meses cuando retornaron del exilio babilónico].

El mes también se denomina Mar-Jeshván, por dos razones:

Mar, en hebreo, significa “amargo“, y denota el hecho de que el mes de Jeshván no contiene Festividades ni días de alegría. Por el contrario, muchas tribulaciones y sufrimientos se abatieron sobre nuestro pueblo durante este mes. En el día 15 de Jeshván, Iarovám ben Nevat organizó en el Reino de Isráel una fiesta que despertó la ira de Di-s contra el pueblo. El 5 de Jeshván, los caldeos asesinaron a los hijos del rey Tzidkiahu en su presencia, para luego dejarlo ciego, y encadenado se lo llevaron cautivo. Durante el mes de Jeshván Di-s castigó a la generación del Diluvio e inundó el mundo entero. El mes se denomina, por ende, Mar-Jeshván: un mes amargo.

Una segunda razón, más esencial, es que mar también significa “una gota de agua“, como expresa el versículo (Isaías 40:15): Las naciones son como una gota de un cubo [“Kemar midelí”], y el mes está bendecido con abundantes lluvias, que todos aguardan ansiosos y sedientos.

Aunque en Jeshván no hay días festivos, hubiera correspondido que se estableciera uno en la época del Rey Salomón, pues fue en este mes cuando se terminó el Beit HaMikdash, tras siete años de construcción (véase 1 Reyes 6:1). Todo el pueblo de Israel ansiaba la inauguración y Salomón aguardaba la orden de Di-s para consagrarlo, pero no la recibió. El Beit HaMikdash permaneció cerrado durante doce meses, hasta la llegada de Tishrei, y fue entonces que Di-s dio la orden de celebrar la inauguración del Gran Templo. Así, podemos decir que Jeshván perdió su Festividad y Tishrei la ganó.

Sin embargo, Jeshván conservó el mérito de que el Beit HaMikdash fuera concluido en ese mes. Durante todos los años que transcurrieron desde la época del Diluvio hasta entonces, el mundo entero permanecía azorado desde el 7 de Jeshván hasta el 27 de Kislev -los cuarenta días del Diluvio-. Pero cuando se completó el BeitHaMikdash en el mes de Jeshván, aquellos cuarenta días dejaron de infundir temor sobre la humanidad. Por este motivo se dice que la letra mem [cuyo valor numérico es 40] fue removida de la palabra mabúl [Diluvio], y el nombre del mes pasó a ser Bul.

Ialkut Shimoni (Reyes 184) señala que Jeshván está destinado a ser recompensado por Di-s en el futuro por la pérdida de su Festividad, como lo fue Kislev, que en cierta época no tenía ninguna Festividad y luego recibió una [Janucá].

Las siete leyes de los hijos de Noé

1. Con respecto a los mandamientos de Di-s, la humanidad está dividida en dos grupos: los Hijos de Israel y los Hijos de Noaj.

2. Los Hijos de Israel son los Judíos, los descendientes del Patriarca Jacob. Ellos tienen el deber de cumplir con los 613 Mandamientos de la Torá.

3. Los Hijos de Noaj comprenden las setenta naciones originales del mundo y sus ramificaciones. Ellos tienen el deber de cumplir las Siete Leyes Universales, también conocidas como las Siete Leyes de los Hijos de Noaj o las Siete Leyes Noájidas. 

Estas Siete Leyes Universales tienen que ver con idolatría, blasfemia, asesinato, robo, relaciones sexuales, comer la carne de un animal vivo y el establecimiento de cortes de justicia.

4. Todas las Siete Leyes Universales son prohibiciones. No hay que sorprenderse: los mandamientos negativos (o prohibitivos) son de un orden superior a los positivos; y, su cumplimiento, conlleva una mayor recompensa.

5. Hombres y mujeres son iguales en su responsabilidad por observar los Siete Mandamientos. 

6. Es materia de disputa la edad a partir de la cual un individuo es responsable por sus acciones bajo estas leyes. Una opinión sostiene que depende del desarrollo mental del individuo. Conforme a esta opinión, tan pronto como un muchacho ha alcanzado la madurez que le permite entender el significado e importancia de las Siete Leyes Universales, está en la obligación de cumplir con la ley en su plenitud. La otra opinión sostiene que un muchacho alcanza la edad de responsabilidad legal a los trece años (doce años en caso de las chicas). 

7. Los Hijos de Noaj están permanentemente advertidos en lo concerniente a las Siete Leyes Universales. Esto quiere decir que no es defensa válida la ignorancia de la ley. Uno no puede afirmar, por ejemplo, que no sabía que la idolatría estaba prohibida por una de las siete leyes. Ni puede tampoco afirmar que no sabía que inclinarse ante un ídolo constituía idolatría.

Nota – Sin embargo, podría afirmar que no sabía que un objeto en cuestión era un ídolo, pues esto no es ignorancia de la ley.

Por tanto, uno tiene el deber de ocuparse en el estudio de las Siete Leyes Universales a lo máximo de su capacidad y enseñar el conocimiento de estas a sus propios hijos.

8. Cuando uno de los Hijos de Noaj resuelve cumplir a cabalidad los Siete Mandamientos Universales, su alma se eleva. Esta persona se constituye en uno de los Jasidei Umot ha-Olam, Justos entre las Naciones, y recibe un lugar en el Mundo Eterno.  Las Santas Escrituras llaman a aquel que acepta el yugo del cumplimiento (cabal) de las Siete Leyes Universales un guer toshav, un Prosélito de la Puerta. Esta persona tiene permitido vivir en la Tierra de Israel y entrar al Santo Templo en Jerusalén y ofrecer sacrificios al Di-s de Israel. 

9. A pesar de que los Hijos de Noaj tienen como obligación sólo el cumplimiento de las Siete Leyes Universales, les está permitido observar cualquiera de los 613 Mandamientos de la Torá con el propósito de recibir recompensa divina. Las excepciones a esto son: 

A. Observar el Shabat a la manera de los Judíos (descansando de las acciones que fueron necesarias para la construcción del Tabernáculo durante el Exodo de Egipto).

B. Observar las festividades Judías a la manera de los Judíos (descansando de forma similar al Shabat).

C. Estudiar aquellas partes de la Torá que no se aplican al servicio Noájida para con Di-s.

D. Escribir un rollo de Torá (los Cinco Libros de Moisés) o recibir una aliyá a la Torá (i.e., leer una porción de la Torá en una reunión pública).

E. Hacer, escribir o vestir tefilín, las filacterías que se usan durante el rezo (judío) y que contienen porciones de la Torá.

F. Escribir una mezuzá, un pergamino particular que contiene porciones de la Torá, o instalarla en el marco de la puerta de acceso al hogar de uno.

Nota – Es el propósito primario de las Siete Leyes Universales el enseñar a los Hijos de Noaj acerca de la Unicidad de Di-s y, por tanto, les es permisible el estudio de aquellas partes de la Torá que corresponden a este conocimiento. Esto incluye los veinticuatro libros de las Escrituras Hebreas; y, del mismo modo, el estudio de cualquier parte de la Torá que conlleve un mayor conocimiento en lo concerniente al cumplimiento de los Siete Mandamientos por parte del Noájida, es permisible. Pero el estudio Talmúdico o Halájico de las materias que corresponden exclusivamente al servicio Judío hacia Dios, está prohibido. El Noájida que estudia porciones de la Torá que no le corresponden, daña su alma. 

10. Si un Noájida está, a la manera judía, esforzándose por aprender Torá o por guardar el Shabat, o si revela nuevos aspectos de la Torá, pudiera ser literalmente restringido e informado de que es merecedor de la pena capital, pero no se lo ejecutará.

Nota – La acción tomada en su contra tiene por objeto simplemente disuadirlo de cometer actos prohibidos.

Nota – Si la corte que está establecida en consonancia con las Siete Leyes Universales decreta la pena de muerte a un Noájida (por alguna transgresión o crimen), la ejecución es una expiación por la transgresión de esta persona y, consecuentemente, quien transgrede y es castigado (con la pena capital) por la corte puede ameritar una porción en el Mundo por Venir. Además, el Noájida debe reencarnar para estar en capacidad de expiar las acciones que, en el pasado, cometió.

11. La observancia de las Siete Leyes Noájidas es un yugo de fe para con Di-s; es decir, deben ser observadas exclusivamente porque Di-s las ordenó. Si un Hijo de Noaj observa estas Siete Leyes Universales por otra razón que no sea cumplir con el deseo de Dios, dicho cumplimiento es inválido y por tanto no le corresponde recompensa divina alguna. Esto quiere decir que si un Hijo de Noaj dice, “Estas leyes se presentan como sensibles y benéficas, por tanto las observaré”, sus acciones no concretan nada y no recibirá recompensa. 

12. Cuando un Hijo de Noaj se embarca en el estudio de las Siete Leyes Universales, es capaz de alcanzar un nivel espiritual superior al del Sumo Sacerdote de los Judíos, quien es el único que tiene la santidad para entrar al Lugar Santísimo en el Templo de Jerusalem.

13. Si un Noájida desea aceptar la reponsabilidad completa de la Torá y de los 613 Mandamientos, puede optar por la conversión y (entonces) ser Judío en cada aspecto. A aquel que opta por esta ruta se le conoce como un guer tzedek, un prosélito justo.

Es un principio del Judaísmo, sin embargo, no buscar conversos; y todo individuo que solicita la conversión es generalmente desmotivado. En caso de que la persona persista en su deseo de conversión, deberá tomar consejo exclusivamente de un Rabino (o erudito) Ortodoxo porque si la conversión es realizada por fuera de los parámetros de la Halajá (Ley de la Torá), no es para nada una conversión válida. Asimismo, una conversión supervisada y concedida por rabinos quienes, por su cuenta, no siguen las leyes de la Torá, es nula y vacua: no es reconocida en los cielo ni por ningún Judío temeroso de Di-s.

14. Es erróneo pensar que, puesto que los Hijos de Israel tienen 613 Mandamientos y los Hijos de Noaj tienen Siete Mandamientos, el rango de valor espiritual es proporcionalmente de 613 a 7. La verdad es que las Siete Leyes Universales son mandamientos generales, cada una conteniendo muchas partes y detalles, mientras que los 613 Mandamientos de la Torá son específicos, cada uno en relación con uno de los detalles básicos de la Ley Divina. Por tanto, la disparidad numérica de ninguna manera refleja el valor espiritual relativo de los dos sistemas de mandamientos. La diferencia primaria en el servicio del Israelita y del Noájida es que el Noájida mira la existencia de la existencia, es decir, mejora el mundo, mientras que el Israelita mira la no-existencia de la existencia, es decir revela la Divinidad al mundo. Por supuesto, mejorando al mundo se revela Divinidad y revelando Divinidad automáticamente se mejora al mundo.

15. El castigo estatutario por transgredir cualquiera de las Siete Leyes de Noaj es la pena capital. De acuerdo con algunos sabios, el castigo es el mismo ya sea con conocimiento o ignorancia de la ley. De acuerdo con otros, un transgresor que es ignorante de la Ley Noájida recibe la pena de muerte sólo en el caso de asesinato. 

16. Si la corte no puede condenar a un individuo por falta de testigos o por cualquier otra razón (veáse el capítulo sobre las Cortes de Justicia), el transgresor será castigado por Decreto Divino. 

17. Junto a las Siete Leyes Universales, los Hijos de Noaj han tomado tradicionalmente sobre si mismos el cumplir con el mandamiento de honrar a padre y madre. 

18. Algunas autoridades son de la opinión de que los Hijos de Noaj tienen que observar el mandamiento de dar caridad. Otros sostienen que es propio y meritorio el que los Hijos de Noaj den caridad pero que en realidad no tienen obligación legal. 

19. Cuando un Noájida observante de las Siete Leyes Universales da caridad, los Israelitas la aceptan y la entregan a los pobres de Israel, porque a través del mérito de dar caridad al pobre (entre el pueblo Judío) uno gana vida por parte de Dios y es salvado de la muerte. Pero cuando un Noájida que no acepta el yugo de las Siete Leyes Universales da caridad, no está permitido entregarla al necesitado de Israel. Su caridad podría ser entregada solamente a pobres entre los Noájidas.

20. Si uno de los Hijos de Noaj se levanta y lleva a cabo un milagro y dice que Di-s lo envió, para entonces instruir a otros aumentando o quitando de lo concerniente a cualquiera de las Siete Leyes o las explica de una manera que no fue escuchada en el Monte Sinaí o si afirma que los 613 Mandamientos dados a los Judíos no son eternos (sino restringidos a un período fijo), esta persona es considerada un falso profeta e icurre en la pena capital. 

21. Hay una tradición oral que dice que los Hijos de Noaj tienen prohibido cruzar animales de diferentes especies o injertar árboles de diferentes variedades; aun cuando algunas autoridades sostienen que es permisivo tanto lo uno como lo otro. En todo caso, pueden vestir shaatnez (vestimenta que contiene lana y lino) y pueden plantar diferentes semillas como la vid y el trigo en un mismo campo, actos que son prohibidos para los Judíos. Aun si estuvieran prohibidas las acciones de cruce de especies, estas no son castigables por parte de las Cortes de Ley.

22. Los Sabios de Israel sostienen que los Hijos de Ketura (los hijos de la concubina de Abraham, Hagar) que nacieron después de Ishmael e Isaac deben por ley ser circuncidados. Puesto que hoy en dia los descendientes de Ishmael están intermezclados con los descendientes de los otros hijos de Hagar, todos están obligados a ser circuncidados al octavo dia después que nacen. Aquellos que transgreden esto no son culpables de pena capital. Esta ley se aplica sólo a pueblos Semitas, a pesar de que todas las demás naciones tienen permitido optar por la circuncisión si así lo deséan.

23. Una opinión sostiene que sólo los seis hijos de Hagar y no sus descendientes tenían como obligación la circuncisión. 

24. En conformidad con las Siete Leyes Universales, el hombre está advertido respecto a crear cualquier religión basado en su propio intelelecto: le corresponde o bien observar las Leyes Noájidas (si es gentil) o bien observar los 613 Mandamientos de la Torá (si es Judío). 

Nota – En lo concerniente a festividades, los Noájidas pudieran participar en ciertas celebraciones Judías tales como Shavuot (la celebración de la Entrega de la Torá), 31o Rosh Hashaná (Dia del Juicio y del Año Nuevo Judío) y Iom Kipur (Dia de la Expiación), pues, siendo importantes, deberían ser consideradas a tal efecto tanto por el Noájida como por el Judío. Rosh Hashaná es también el dia en que Adán, el Primer Hombre, fue creado por Di-s; y toda la humanidad desciende de Adán así como desciende de Noaj. Aun en estas festividades, sin embargo, los gentiles celebran sólo con el propósito de ganar mérito adicional y recompensa; y no pueden descansar a la manera de los Judíos. Más aun, el Noájida tiene estrictamente prohibido crear una nueva festividad que tenga un sentido religioso para afirmar entonces que es parte de su propia religión, aun si la religión fuera la observancia de las Siete Leyes Noájidas. Por ejemplo, tiene prohibido establecer una festividad celebrando el asentamiento de las aguas del Diluvio o cualquier cosa por el estilo. Y, lo que es más importante, tiene prohibido instituir festividades que adscriban significado religioso a eventos fuera de la esfera de los Siete Mandamientos Noájidas. La celebración de actividades seculares y la conmemoración de hechos históricos, aun si involucran una comida festiva, están permitidas.

25. Las naciones del mundo reconocen la existencia de Di-s y no contravienen Su deseo; sin embargo, el problema radica en que las naciones han presentado regularmente una incapacidad de nulificarse ante Di-s y niegan Su Unicidad al pensar que ellas mismas constituyen entidades separadas, refiriéndose a El como Di-s de dioses. Se deriva, por tanto, que cuando los gentiles transgreden los Siete Mandamientos Noájidas, se debe solamente al espíritu de “ingenuidad” que entra en ellos ocultándoles la verdad. Pero en su ser esencial, no son capaces de transgredir el Deseo Divino. De hecho, incluso Balaam, el profeta vil, dijo, “No soy capaz de contravenir la palabra de Di-s” (Números 22:18).

26. El mandamiento de ser fructífero y multiplicarse fue entregado a Noaj pero, puesto que no fue repetido en el Monte Sinaí, este mandamiento no es considerado como parte de las Siete Leyes Universales. Sin embargo, los Hijos de Noaj tienen la obligación de convertir al mundo entero en un lugar acogedor para la humanidad. Esto se cumple de forma mínima cuando la pareja trae a este mundo un niño y una niña que a su vez sean capaces (cuando llegue el momento) de reproducirse. Más aun, la pareja que engendra más hijos está trayendo más benevolencia espiritual al mundo, suponiendo que estos niños son educados en un ambiente de moralidad a través del cumplimiento de las Siete Leyes Universales.

27. Un Noájida que golpéa a un Israelita causándole aun una ligera magulladura, a pesar de que teóricamente es condenado por ello, no recibe la pena de muerte. 

28. Cuando un Noájida muere; sus restos deberían ser depositados en tierra, “pues de ella fuiste tomado; porque polvo eres y al polvo volverás” (Génesis 3:19). Esto no quiere decir que los Hijos de Noaj transgreden uno de los Siete Mandamientos al utilizar procesos como la cremación o la preservación criogénica, sino que carecerán de la expiación que el entierro conlleva. 

29. Al observar las Siete Leyes Universales, la humanidad usa la herramienta justa con la que puede perfeccionarse a sí misma. El individuo, a través de estas leyes, tiene el poder de refinar su ser esencial y puede elevarse cada vez más alto, sin límite. Porque está escrito, “Llamo al cielo y tierra para que atestigüen que cualquier individuo, hombre o mujer, Judío o Gentil, libre o esclavo, puede tener el Espíritu de Santidad morando sobre él. Todo depende de sus actos”. Y también está escrito, “Ultimadamente, todo está entendido: teme a Di-s y observa Sus Mandamientos, porque esa es la realización del hombre” (Eclesiastes 12:13).

Fuente:
The Path of the Righteous Gentile (An introduction to the Seven Laws of the Children of Noah)

Juan Mayorga Zambrano (traductor) & Yehuda Ribco (asesor de traducción)

Traducción al Castellano bajo permiso del Rabino Chaim Clorfene a partir de la edición 1987 (Feldheim Publishers Ltd.).

Fuente

¿Qué es el Shabat Bereshit?

¿Por qué se llama así este Shabat?

Por Menachem Posner

Ya pasaron los Iamim Noraim. La alegría de Sucot y de Simjat Torá ya pasó, pero todavía queda algo importante antes de que termine el emocionante mes de Tishrei. Se trata del primer shabat después de las fiestas, conocido como el shabat Bereishit (o shabos Bereishis, en ídish).

¿Por qué se llama así?

Cada semana del año leemos una porción de la Torá. El ciclo termina y empieza de nuevo en la alegre fiesta de Simjat Torá, cuando leemos la parte final de Haazinu y las primeras líneas de la primera porción, Bereishit. En el siguiente shabat se lee de la Torá toda la porción de Bereishit.

Se dice en nombre del tercer rebe de Jabad (conocido como el Tzemaj Tzédek) que la manera en la que uno se conduce a sí mismo en el shabat Bereishit marca el tono para el resto del año.

En consonancia con esto, este shabat se suele reservar para inspiradores farbrenguens y resoluciones respecto de estudiar más Torá. Estos farbrengens tienen una función adicional, porque este shabat también es el shabat Mevarjim, momento en el que bendecimos el próximo mes de Jeshvan.

Durante el farbrenguen del Rebe en este shabat tan especial, lo tradicional era que se remataran los “honores”. Adornado con un shtreimel de piel, el gabbai de la sinagoga guiaba el proceso, y la gente competía por el honor de pagar la iluminación de la sinagoga, el vino de kidush y otros gastos.

Como furgón de cola de un largo tren, este shabat nos ayuda a juntar la energía espiritual del mes que se termina, y nos asegura mantenernos en nuestro carril para el largo viaje que tenemos por delante.

Hospitalidad Divina

Ushpizin en Arameo quiere decir “huéspedes.” Traducido al español, la palabra pierde algo de su misterio y algo de su sentido, estos “huéspedes” son de hecho absolutamente misteriosos (por lo menos hasta que aprendemos más sobre ellos) y de otro mundo (por lo menos hasta que les hagamos lugar en nuestro mundo). Utilizamos el término Arameo porque nuestra fuente original sobre estos huéspedes místicos es el Zohar, el  mayor trabajo cabalístico escrito en esta lengua mística.

Hay siete “huéspedes” que vienen a visitarnos en la sucá, la choza cubierta de ramas en la cual comemos nuestras comidas a lo largo del festival de Sucot — uno para cada uno de los siete días del festival.

Está escrito en el Zohar (Libro básico de la Cabalá), que durante los días de la festividad de Sucot concurren a la Sucá los USHPIZIN (huéspedes).

Son los Tzadikim de nuestro pueblo: Abraham, Itzjak, Iaakov, Moshé, Aarón, Iosef, David. Cada día de la fiesta uno de ellos es el visitante principal y los demás lo acompañan. La primer noche recibimos a Abraham Avinu (nuestro patriarca).

Abraham se destacó por su entrega a la Mitzvá de hajnasat orjim (hospitalidad con los forasteros), que realizaba con fervor y entusiasmo.

La Guemará aprende de él que “es mayor la Mitzvá de hajnasat orjim que recibir la Morada de Di-s”, ya que Abraham pidió permiso a Di-s para interrumpir Su visita y poder atender a unos forasteros que se acercaban.

TODOS SOMOS VISITAS

La esencia de hajnasat orjim refleja la esencia de nuestro servicio a Hashem en el galut (exilio). El pueblo de Israel se encuentra en este momento en una situación de “visita”, Nuestros Sabios compararon las circunstancias del galut con “ hijos que fueron desterrados de la mesa de su padre”. El lugar natural del iehudí es encontrarse junto a la mesa de su Padre, Di-s, entonces durante el exilio el judío no está en su espacio original, adoptando la característica de foráneo. ¿Por qué creó Hashem esta situación?, Esto se debe a la integridad que logramos en nuestro servicio a Él en este período.

 

LA VENTAJA DEL GALUT

Nuestros Sabios dijeron: “Di-s tuvo misericordia al dispersarnos entre los pueblos”. Toda la intención de este esparcimiento a lo largo y ancho del mundo no es un castigo sino una meta positiva. La voluntad de Di-s es que cada iehudí introduzca Santidad y Divinidad en cada lugar que se encuentre y lo convierta en apto para ser “una morada para El” en el momento de la llegada del Mashíaj. También así se expresa Rabí Israel Baal Shem Tov, el primero de los huéspedes jasídicos, sobre el versículo “Di-s conduce los pasos del hombre”, es decir que a cada lugar al que el judío llega, no lo hace por propia voluntad sino que Hashem guía sus pasos para que cumpla su misión en este mundo.

 

LA VIRTUD DEL HUÉSPED

La Mitzvá de hajnasat orjim manifiesta la importancia y valor del servicio cuando estamos en el contexto de orjim.

Por medio de que un judío recibe hospitalidad se logra una elevación espiritual que incluye tanto al anfitrión como al invitado.

Y esta también es la riqueza exclusiva de los días del galut, ya que sólo por medio de ella podemos “recibir la Morada de Di-s” así como será  en el momento de la llegada de la Gueulá, donde se revelará la Gloria de Hashem, con alegría.

 

LIKUTEI SIJOT, TOMO 29, PAG. 354

Las Cuatro Especies

“Ulekajtem lajem baiom harishon pri eitz hadar, kapot tmarim, veanaf etz avot, varvei nachal”

“Tomarán para ustedes el primer día (de Sucot) el magnífico fruto del árbol, la hoja de palmera de dátiles, ramas de árbol trenzado, y sauces de los arroyos”

(Levítico 23:40).

Te encuentras sentado en la Sucá. Las paredes hechas con madera aromática. En el suelo detrás de ti hay un juego de luces y sombras generado por el Sjaj, el techo de hojas que se encuentra sobre tu cabeza. Respira profundo. Vive la paz dentro de las paredes de la Sucá.

El Sjaj en la sombra proyectada por un árbol celestial. Es antiguo, amplio y con vida. Dentro de las ramas puedes ver una fruta, un Etrog. Es el corazón dentro del corazón del Árbol de la Vida, y late con el amor infinito de Di-s, para ti.

Toma tiempo interiorizar este amor. Respira profundo. Siente cómo tu columna se estira. Tiene la forma de la hoja de palmera, el Lulav. Trasciende tu mente racional, llegando más arriba, más allá del Sjaj, dentro del corazón del árbol. Siente el punto de contacto del Lulav con el Etrog. El amor de Di-s comienza a bajar a través del Lulav-columna, hasta tu sacro.

Tu sacro está caliente. El amor comienza a sentirse. El amor del Lulav penetra tu corazón. Te lleva a tu ser más elevado. Tu corazón se ha convertido en un todo. Es un Etrog que late con amor hacia Di-s, por la chispa de Divinidad que hay en tu alma. La alegría se despierta cuando este amor es liberado.

El amor viaja a través de tus pulmones llegando a tu boca. Tus labios tienen la forma de una hoja de sauce. No tienes necesidad de hablar, simplemente deja que tu alma se eleve.

La energía fluye incluso hasta más arriba, entrando a los ojos y así llegando hasta tu frente. Ojos de mirto iluminados. Tómate un momento en visualizar tu vida a través de los lentes de abundancia y alegría. Observa la forma en la que te despiertas cada mañana, interactúas con otros y rezas cuando estás lleno de amor y felicidad.

Por: Shimona Tzukernik

La alegría de Bet Hashoeva

“Quien no vio la alegría de Beit Hashoevá no vio alegría en sus días” (Sucá 51,a)

En la Fiesta de Sucot hay un mandato especial de alegrarse, y la misma fiesta es llamada en nuestras plegarias “Tiempo de nuestra alegría”, Zman Simjateinu. 

Además, hay en esta fiesta preceptos que traen consigo alegría adicional, como ser la alegría de Bet Hashoevá, la cual está ligada con el precepto de verter el agua sobre el altar del Templo de Jerusalem(1). Cuando se extraía el agua del río Shiloaj se festejaba con gran algarabía, “y extraerán agua con júbilo, de los manantiales de la salvación”(2)

La alegría de Bet Hashoevá supera a todas las demás alegrías, al extremo de que nuestros Sabios z”l declararon (3) que: “Quien no vio la alegría de Bet Hashoevá, no vio alegría en sus días”. ¿Qué tiene de especial verter agua sobre el altar como para generar una alegría de tal magnitud?

VINO – ALEGRÍA LIMITADA

En el Sagrado Templo se vertía vino sobre el altar. El derramar el vino se realizaba con alegría y cánticos, y como decía nuestros Sabios z”l (4): “no se recitan cánticos sino sobre el vino”. Pero la alegría de verter agua la superaba totalmente. Esto es sorprendente, puesto que la característica del vino es generar alegría, mientras que el agua no posee elemento alguno que provoque alegría.

Pero en verdad justo aquí está la respuesta. El verter el vino, que alegra por naturaleza(5), genera una alegría ligada a las características y tendencias naturales del hombre. Esta es una alegría limitada en su misma esencia, ya que depende del grado de alegría que puede generar el vino. Mientras que verter el agua refleja una alegría generada por lo Divino, que no depende de la naturaleza humana, por ello es ésta una alegría ilimitada.

AGUA- ALEGRÍA SIN FIN

En ambas mitzvot,- verter el vino y verter el agua,- la alegría está ligada a la santidad del precepto. Sin embargo, en el vertido del vino la alegría de la mitzvá está engarzada con la característica alegre del vino, como decían nuestros Sabios z”l(6): “no hay alegría salvo con el vino”. Eso hace que la alegría sea limitada, ya que la característica del vino que genera alegría es limitada.

En contraposición con ello, la alegría del verter agua no está vinculada con un factor natural. Por el contrario, por su naturaleza, el agua no genera alegría alguna. La alegría surge aquí del aspecto Divino de la Mitzvá,- del hecho que Hashem nos ordenó verter agua sobre el altar. El judío celebra el hecho de que se le dio el privilegio de cumplir con la Voluntad Divina. Es por ello que esta alegría no tiene medida ni límite alguno.

VINO Y AGUA HOY EN DÍA

También hoy existe el verter del agua y del vino en un sentido espiritual. “Verter el vino” significa la alegría al cumplir una mitzvá como consecuencia de una elaboración racional. Siendo que la felicidad proviene de lo racional, que es limitado, también la alegría es limitada.

“Verter el agua” significa una alegría al cumplir los preceptos, que proviene del interior del alma, más allá de la lógica. Cuando un judío se entrega totalmente al Altísimo, al escuchar que Hashem le manda cumplir una Mitzvá no requiere de un análisis intelectual y de una racionalización, y se llena espontáneamente de una poderosa alegría que brota de lo profundo de su alma Divina. Esta alegría no tiene límites, esta es la alegría de Simjat Bet Hashoevá, y quien no tuvo el privilegio de verla “no vio alegría en sus días”.

(Likutei Sijot tomo 24 pag.246)

1. Rambam Hiljot Tmidin Umusafin cap 10:6 2.Ieshaiahu 12:3 3.Sucá 51:a 4.Brajot 35,a 5.Ver Menajot 20,a 6.Psajim 109,a Shulján Aruj Amur Hazakén Oraj Jaim 529 inc. 7

Los secretos de Sucot

Sucot es la Fiesta de la Alegría; es el tiempo de cosechar el producto del campo, el huerto y la viña…

 

Encuentra su trabajo premiado con tanto éxito, que podría llegar a pensar que “mi poder y la fuerza de mi mano han hecho toda esta riqueza”. También podría llegar a pensar que trabajar y juntar una fortuna son el propósito en la vida, olvidándose que hay valores más importantes y elevados, como los valores espirituales.

Para que el judío no se olvide de su propósito real en la vida, Di-s, en Su sabiduría infinita y amorosa, nos hace dejar nuestras cómodas casas y morar en una Sucá frágil durante siete días.

La Sucá nos recuerda que nosotros confiamos en Di-s para protección, ya que la Sucá no es ninguna fortaleza, inclusive ni siquiera tenemos un techo sólido encima de nuestras cabezas. Eso también nos recuerda que esta vida en la tierra es una morada temporal.

Los siete días de Sucot, cada uno representa una década de vida, setenta años en total de vida humana en esta tierra. Este corto tiempo sólo debe ser considerado como un período de preparación para la vida eterna que viene luego de la vida en esta tierra, una vida donde la riqueza material no cuenta, donde sólo cuentan las riquezas espirituales. Los graneros, el vino, el aceite deben dejarse atrás, mientras sólo los graneros de la Torá, las mitzvot y las buenas acciones pueden llevarse y darnos méritos en esa vida eterna.

Éste también es una de las razones del por qué es costumbre, en algunas congregaciones, leer el Libro de Eclesiastés (Kohelet) durante la Fiesta de Sucot. El Libro de Kohelet, proféticamente escrito por el más sabio de todos los hombres, el Rey Solomón, está lleno de pensamientos profundos y reflexiones sobre “la vanidad de vanidades” de este mundo. Concluye propiamente con las palabras, “Habiendo sido todo escuchado, he aquí la conclusión del asunto:teme a Di-s y cumple Sus mandamientos, porque en eso está el hombre íntegro”.

De esta manera, Sucot, “la Fiesta de la Alegría” en un sentido más profundo nos enseña a recoger, retener y almacenar las experiencias religiosas y el elevamiento espiritual que hemos adquirido durante las muchas y variadas fiestas, plegarias y mitzvot del mes de Tishrei, para que podamos utilizar estos ricos “graneros” a lo largo de todo el año que comienza.