Cuando Moshé pastoreaba un rebaño de ovejas de su suegro, un corderito se le escapó…
Moshé lo siguió y lo encontró bebiendo de una pileta de agua. Dijo, “veo que te escapaste porque estabas sediento. Ahora, si corriste todo este trecho, debes estar cansado”. Entonces lo cargó a su hombro y lo llevó de vuelta hasta el rebaño.
Dijo Di-s, “Tú (Moshé), que cuidaste al corderito con tanta misericordia, serás un líder compasivo para Israel, mi rebaño”. Más temprano en la vida de Moshé, la Torá nos cuenta que mientras él era aún un príncipe en el palacio del Faraón, vio a un compañero judío en problemas e inmediatamente intervino para salvarlo.
Del antedicho Midrash podemos observar las características de un verdadero líder judío. Como Moshé, no solo debe preocuparse por el destino de la nación como un todo, sino también por cada Judío como individuo. Cuando un Iehudí se extravía, el líder no ve a un rebelde, sino a una persona que está sedienta de Torá y lo provee con los medios que apaguen esa sed.
Más adelante, Moshé podría haber continuado su vida confortable, mas abandonó el palacio para ayudar a otros judíos. Similarmente, un verdadero líder judío no se contenta con encerrarse en el confortable medio ambiente de su propia comunidad. En lugar de esto, se expande hacia todos los judíos, incluidos los corderitos perdidos. .
¿Jasidim en Katmandú? Mark no podía creer lo que veía. Él llegó a éste en el Himalaya para “encontrarse a sí mismo”. En este reino Hindú y Budista entre la India y el Tibet, esperaba “encontrar su alma”. Sorpresivamente, se encontró a sí mismo cara a cara con dos jóvenes, barbados: Jasidim.
En Katmandú, sin sinagoga, con una población judía permanente de cuatro familias, los Lubavitchers organizaron un Seder para 500 judíos. Allí, Mark encontró su alma. Así sucedió con otros en lejanos lugares como Bangkok, Singapur, Guayaquil, Cochabamba, Pueblo Cazes. ¿Qué es lo que los hace a los Lubavitcher aunque sea pensar en esos recónditos lugares?
¿Jóvenes judíos que se muden a la ex Unión Soviética? Con la llegada de la Perestroika, el único movimiento clandestino que mantuvo intacta la llama del judaísmo bajo las circunstancias más adversas, salió ahora a la superficie. Cientos de instituciones educativas se establecieron allí y docenas de emisarios se han radicado allí. ¿Por qué han abandonado el confort de occidente para mudarse a Rusia?
¿Miles de centros alrededor del mundo? ¿Cuál es la fuerza inspiradora detrás de estos establecimientos?
Esa fuerza es Rabí Menajem Mendel Schneerson, llamado simplemente el “Rebe” por sus decenas de miles de jasidim y por sus centenas de miles de admiradores. Su genio se muestra en cada aspecto de la Torá, y su formidable inteligencia en matemáticas y ciencias ha asombrado incluso a los expertos en esos campos.
Por decenas de años el Rebe ha enviado a jóvenes a establecer centros de Torá y actividades judías. De este modo, la influencia del Rebe se ha extendido más allá de la comunidad de Lubavitch hacia la corriente principal de la vida judía. Para estos incansables hombres y mujeres, reforzados por su fuerza e inspirados en su fe, nada ha sido muy dificultoso por alcanzar.
Que todos tengamos el mérito que se complete su mayor aspiración: ¡la llegada del Mashiaj pronto en nuestros días!
Por Rabi S.Wilschansky